Si bien Leonora Carrington nació en Inglaterra, tras la Segunda Guerra Mundial decidió mudar toda su vida a tierras mexicanas y darle vuelo a su carrera artística. Fue aquí donde explotó su potencial y donde plasmó en una dimensión mundana todos sus sueños, visiones y composiciones surrealistas. Ahora, a ocho años de su muerte, cientos de cuadros, esculturas, fotografías y dibujos conforman su amplio legado.
Carrington jugó un papel importante en la escena artística del México de la segunda mitad del siglo XX (conoció a Luis Buñuel y a Carlos Fuentes, por mencionar a algunos). Hoy en día, su acervo se encuentra repartido en dos museos –en San Luis Potosí y en Xilitla– y próximamente en su Casa-Estudio que abrirá a finales de 2020 después de que se restaure y acondicione como museo.
Por esto, a modo de preámbulo de lo que la Casa-Estudio ofrecerá a sus visitantes una vez que abra, la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), institución que posee dicho inmueble, inauguró la muestra Leonora íntima: objetos y memorias. La exposición se encuentra dentro de la Casa de la Primera Imprenta de América, un espacio también perteneciente a la Universidad, localizado en el Centro Histórico. De hecho, la muestra celebra la reapertura de este inmueble después de la minuciosa remodelación de su fachada histórica.
En ella se exhiben dos centenares de artefactos que pertenecieron a la pintora que, más que producirlos, rondaban en su entorno cotidiano; destacan fotografías, agendas, correspondencia con personajes cercanos, dibujos, bocetos e incluso un par de bordados. La idea detrás de la curaduría es dar vida al contexto que trajo a Leonora Carrington a México. Obras como La inventora del atole o Cabeza de cocodrilo decoran el recorrido.
La inventora del atole. Foto: Noé Parra.
La Casa de la Primera Imprenta de América
Este edificio colonial, de apenas tres pisos y una fachada color granada, se ubica a solo unos pasos de Palacio Nacional y es uno de los más antiguos de la ciudad. Su otro mote, Casa de las Campanas, se debe a que en 1527 fue el taller en donde se fundieron las campanas de la Catedral.
Más tarde, en 1539, Juan Pablos estableció ahí dentro la primera imprenta del continente. El impresor, que se dice no sabía ni leer ni escribir y sólo copiaba los símbolos que veía, estrenó el mecanismo con la impresión del libro Breve y más compendiosa doctrina cristiana en legua mexicana y castellana.
Con la remodelación, ahora la Casa de la Primera Imprenta de América cuenta con una terraza. Foto: UAM.
Leonora íntima: objetos y memorias
La exhibición se inauguró el pasado 25 de septiembre y estará disponible hasta el 24 de enero de 2020 de lunes a viernes de 10 a 18 horas y sábados de 10 a 15 horas. El acceso es gratuito para todo público.
Dirección: Lic. Primo Verdad 10, Centro Histórico, CDMX.
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