Rescatar perros en Chérnobil (y otras experiencias con animales que ofrece Airbnb)
Aventuras un tanto raras, pero muy divertidas.
POR: Frida
El planeta no sería el mismo sin los animales. Esos seres resilientes (de formas, colores e inteligencias infinitas) que habitan en todos los paisajes y que han acompañado a la Tierra desde los primeros momentos en los que la vida se convirtió en vida. A lo largo del tiempo, la fauna ha coexistido de una forma silenciosa, emocional y en ocasiones, devastadora con los humanos. Por fortuna, esta intrincada relación ha avanzado al ritmo de las culturas y de los viajes y hoy en día existe un gran número de iniciativas para conocerlos en sus hábitats y hasta para protegerlos.
Un ejemplo de lo anterior es un novedoso proyecto ideado por Airbnb. La compañía quiere expandir sus horizontes, y los de sus usuarios, por lo que ahora ofrece a los viajeros la oportunidad de vivir experiencias con animales. Una nueva modalidad en la que las personas podrán interactuar con varias especies y sus comunidades.
Experiencias con animales
Actualmente, la empresa suma mil experiencias distintas con más de 300 especies alrededor de todo el mundo. Entre ellas, está la oportunidad de andar en paddle board con corgis, pasear en kayak con conservacionistas para ver pingüinos, trabajar junto a apicultores, andar en patineta con el bulldog ganador de un récord mundial y hasta rescatar cachorros en la zona de exclusión de Chernóbil.
El objetivo de Airbnb es crear nuevos puentes entre los humanos y los animales. A través de actividades innovadoras se pretende también enseñarle a los viajeros la necesidad de preservar la vida de todos los seres y realizar exploraciones de una forma responsable. Cada una de las experiencias está respaldada y avalada por la World Animal Protection, organización global que busca proteger a la fauna desde hace más de 50 años.
Convivir con animales de una forma más humana
A la hora de planear estas aventuras, se tomaron en cuenta varios factores. Por ejemplo, si se visitan ecosistemas salvajes, el contacto con las especies no debe ser directo y no se pueden acariciar ni montar. Si se trata de animales de servicio como caballos, entonces el jinete no debe pesar más del 20% de la masa total del animal. Por otro lado, a la hora de interactuar con ejemplares marinos, se buscan sitios lejos del cautiverio. Por cierto, todas las ganancias son destinadas a organizaciones sin fines de lucro que ayudan a la conservación.
¿Y en México?
En México, Airbnb cuenta con 25 experiencias de este tipo, entre las que destacan un acercamiento a la cultura Maya y la conservación de las abejas; hacer kayak con leones marinos en La Paz; observar las aves en el bosque de Chapultepec; ver el amanecer rodeado de monos y pájaros, pasear a caballo por las aguas termales de Puerto Escondido, o jugar y cuidar perros de la calle en la Ciudad de México.
Para conocer todas las experiencia disponibles visita el sitio web.
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