Cinco cabañas para ver la Vía Láctea (y solo contemplar el cielo)
Se acerca una de las mejores épocas para salir y ver el cielo nocturno.
POR: Paola Gerez Levy
Pocas cosas se comparan con encontrar un espacio en el que el tiempo no sea un problema. Recostarse y mirar al cielo y pensar que es como lienzo salpicado, el mismo que en otro siglo vieron Galileo y Copérnico, y del que se desprenden todas las hipótesis del origen y del tamaño. Y aunque para hacer esta actividad basta con subir la mirada, la ciudad ha demostrado ser un mal lugar para logarglo, entre otras cosas por la contaminación lumínica que hay. Con esto en mente se recomienda buscar cabañas lejanas que están en sitios donde el cielo se abre por completo.
Con esto en mente, Airbnb hizo una selección de cinco de sus propiedades en México –desde las colinas áridas del Valle de Guadalupe hasta playas lejanas– donde los huéspedes pueden tener una experiencia sideral increíble, pues los detalles del cielo nocturno salen a relucir y podemos (porque debemos) al fin contemplar la Vía Láctea.
En estos viajes, además de poder contemplar astros, hay que aprovechar también para tal vez cazar una de las lluvias de estrellas que ocurren cada año. De hecho de aquí a diciembre habrán tres: las Oriónidas, que alcanzarán su punto cumbre el b20 y 21 de octubre; las Táuridas del Sur, que se manifestarán entre el 10 de septiembre y el 20 de noviembre con un auge el 29 y 30 de octubre; y las Leónidas, que ocurrirán entre el 6 y el 30 de noviembre.
Sin más, aquí les dejamos los cinco alojamientos que Airbnb ofrece para ver las estrellas…
Campera Hotel, Bubble Deluxe
Valle de Guadalupe
En medio de montañas áridas, rocas milenarias, cactus y los mejores viñedos de México se encuentra este alojamiento en forma de burbuja futurista. Se trata de una habitación para dos huéspedes que cuenta con jacuzzi, terraza exterior y mucho espacio para salir a caminar en la noche y mirar hacia arriba. El clima mediterráneo de la región permite que los cielos sean despejados la mayor parte del año, aumentando las posibilidades de ver estrellas.
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Villa Vidrio by Los Amigos
Tulum
A solo cinco minutos del pueblo más bohemio del sureste se eleva, como contrapeso, una casa contemporánea de esquinas marcadas y paredes de vidrio. Esta construcción, de tres recámaras, admite hasta ocho huéspedes, quienes tienen acceso al jardín y a la infinity pool. Además de aprovechar la noche en el exterior cálido, también se puede contemplar el cielo desde el interior.
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Casa Vivero
Tapalpa, Jalisco
A poco más de dos horas al sur de Guadalajara se encuentra un chalet de adobe en medio del bosque. La propiedad, de una habitación, es perfecta para viajes en pareja. Ofrece una terraza techada con equipales y hamaca y un gran jardín en el que se puede hacer una fogata, respirar el aire fresco que sólo se encuentra entre los pinos, y dejarse iluminar por las luces del cielo oscuro.
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24/7 Soundwaves Container Home
Ensenada
Si uno baja por la autopista Escénica que conecta a Tijuana con Ensenada uno llegará a esta propiedad peculiar. Con una arquitectura que imita la de un contenedor, esta casa se encuentra entre el mar y el desierto, permitiendo un espectáculo sideral que empieza desde el atardecer y no termina hasta que el cielo clarea con el amanecer. El alojamiento, de dos habitaciones, con vista al mar, recibe hasta cuatro visitantes y ofrece jardín con terraza.
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Casa del Árbol Pinochueco
Dormir en este alojamiento es situarse, literalmente, entre el cielo y la tierra. Aquí pueden hospedarse hasta cuatro personas, en dos habitaciones que se ubican en un chalet construido en un árbol. Además, a través de un puente colgante de madera uno llegar a una terraza elevada ideal para hacer una fogata en la tarde, cuando el frío de bosque comienza a sentirse. Luego en la noche hay la oportunidad de mirar entre las copas de los pinos y divisar los destellos del horizonte.
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Foto de portada: cortesía Airbnb
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