Colombia es un destino que figura cada vez más en las listas de destinos buscados por los mexicanos. Esto lo sabe bien la aerolínea nacional Interjet, la cual inauguró una nueva ruta aérea sin escalas que une a la Ciudad de México con Cartagena de Indias, en el Caribe colombiano.
Las rutas tienen una frecuencia de cuatro días semanales: lunes, miércoles, viernes y domingo. El trayecto de ida parte de la capital mexicana a las 7:40 de la mañana y aterriza en Colombia a las 12:55 del mediodía. En cuanto a la conexión de regreso, el vuelo despega de Cartagena a las 13:55 horas para arribar a la Ciudad de México a las 17:20 de la tarde.
Foto: Luis Vidal
La buena noticia: Interjet puso los boletos para un viaje redondo, con impuestos incluidos, a un precio de introducción de $348 dólares por pasajero. Esta promoción será válida hasta el 2 de enero y solo aplica en la compra de vuelos hasta el 29 de febrero de 2020.
La compañía busca expandir su red de destinos, que con Cartagena suma 87 conexiones nacionales e internacionales. A todo esto, Colombia ha sido una de sus más grandes apuestas, pues además de esta ciudad caribeña, Interjet también vuela a Bogotá y a Medellín de forma directa desde la Ciudad de México y desde Cancún, atendiendo a millones de pasajeros de placer y de negocios.
¿Qué visitar en Cartagena de Indias?
Esta no es una ciudad más a orilla del mar Caribe. Se trata de una urbe pequeña que apenas supera el millón de habitantes pero que guarda cientos de historias y leyendas de la Conquista que se originaron tras su fundación en 1533. Los distritos de El Centro y San Diego son un excelente ejemplo del paso del tiempo de Cartagena; ahí uno puede pasear durante horas por callecitas dentro de las murallas, disfrutando del calor de la tarde y admirando obras de arquitectura colonial.
Foto: Evy Prentice
Algunos ejemplos de ello son el Palacio de la Inquisición, que se encuentra en la céntrica Plaza de Bolívar y que actualmente alberga el Museo y Archivo Histórico de Cartagena de Indias. Otro es el Castillo de San Felipe de Barajas, construido en 1536 y que se considera la fortaleza más grande construida por los conquistadores españoles en sus territorios de ultramar.
Lo que hace único el ambiente cartagenero es la fusión entre una apariencia española antigua pero con una personalidad puramente caribeña. Playa, palmeras por doquier, música de tambores y maracas, y numerosos restaurantes que ofrecen ceviches hacen de un viaje a Cartagena una experiencia de relajación y descanso. Para los que prefieren disfrutar la arena y el mar, existe Playa Blanca, una fracción de costa concurrida por locales y foráneos por igual, o bien La Boquilla, un poco más tranquila y menos saturada.
Isla Grande, otra de las playas populares de la ciudad, está protegida como parque natural.
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