Con la intención de crear un puente entre ambos países, Estados Unidos ha tenido una embajada en la Ciudad de México desde finales del siglo pasado. A pesar de tener varias casas, en 1964 estas oficinas se establecieron sobre su famosa sede en el Paseo de la Reforma. En su tiempo este recinto diplomático fue el segundo más grande del mundo, y hoy en día continúa en operaciones.
No obstante en 2019 todo cambiará, ya que desde diciembre empezó a planearse la construcción de la nueva embajada de Estados Unidos en la CDMX. Para su edificación el sitio contó con una inversión de casi 1,000 millones de dólares, lo que la convertirá en un uno de los proyectos diplomáticos más caros del mundo. Por otro lado, el diseño del sitio correrá a cargo de Tod Williams Billie Tsien Architects/Davis Brody Bond Joint Venture de Nueva York.
Se trata de un sitio de 3.4 hectáreas que estará ubicado en avenida Casa de la Moneda, entre Legaria y Presa Falcón; en el corazón del Nuevo Polanco. Se prevé que la obra se concluya en el 2022 y que además de ser la representación de nuestro vecino del norte sea también un centro de investigación y recreación estudiantil.
Un menor impacto al medio ambiente
Hay que destacar que la construcción de la embajada tendrá impacto al medio ambiente mínimo. Esto se debe a que el proyecto estará registrado en el Consejo de Construcción Verde de los Estados Unidos y contará con una calificación ecológica de Liderazgo en Energía y Diseño Ambiental (LEED®).
Lo anterior se logrará gracias al uso de agua regenerada tanto para para el desagüe como para la ventilación con el fin de hacer un uso más responsable del H2O. Además, el edificio contará con enfriadores de cojinetes magnéticos, así como con plantas solares fotovoltaicas en el techo del patio para reducir la demanda eléctrica.
Otros consulados en México
Aunado a la nueva embajada, Estados Unidos planea la construcción de otros tres consulados en las ciudades de Guadalajara, Hermosillo y Nogales. Estas nuevas instalaciones también se terminarán en 2022 e incorporan conceptos de diseño que rinden tributo a tradiciones arquitectónicas mexicanas y estadounidenses. En total, estos proyectos representan una inversión superior a 1,500 millones de dólares en la economía mexicana mediante contratos con constructores, proveedores y trabajadores, de hecho se generarán más de 4 mil empleos locales.
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