Ser testigo de la majestuosidad de la fauna africana es una experiencia única en la vida. La misma palabra Safari, que significa viaje en suajili, invita a la aventura. Y aunque hay muchos destinos en donde se puede experimentar el lado más salvaje del planeta, Kenia es el destino ideal para cumplir este sueño.
Dicho país africano cuenta con diferentes reservas naturales como Masai Mara que contiene una de las concentraciones de vida salvaje más grande del mundo. Otra opción es el Parque Nacional Amboseli, que además de la fauna también brinda la posibilidad de ver el Monte Kilimanjaro.
Un descubrimiento sin precedentes en un siglo
Este país es el hogar de varias especies de felinos, tales como el león o el guepardo. Pero, además de todo y para sorpresa de muchos, el fotógrafo Will Burrard-Lucas demostró que Kenia también es el hábitat de una de los más criaturas más extrañas del mundo: el leopardo negro.
Foto: Will Burrard-Lucas
La últimas fotos de este felino fueron tomadas en 1909 en Etiopía, por lo que estas imágenes, publicadas recientemente, son la primera documentación científica (en un siglo) de la existencia de esta criatura en tierras africanas. Hay que destacar que para obtener las sorprendentes postales del animal se necesitaron varios días de observación, así como la instalación de cámaras trampas en la Reserva Nacional de Laikpa.
El leopardo Negro
Las imágenes muestran un leopardo negro hembra en compañía de su madre, la cual es de color “normal”, es decir, pinto. El curioso animal es parte del 11% de leopardos que tienen una condición llamada melanismo. Esta cualidad es lo contrario al albinismo, ya que mientras uno no produce melanina, el otro produce un exceso de ésta, lo que genera mayor cantidad de pigmento y hace su piel de un color negro intenso.
Foto: Will Burrard-Lucas
La rareza de estos gatos los han hecho todo un mito entre los pobladores. Aunque a lo largo de la historia de Kenia se han generado múltiples leyendas de personas que decían haberse topado con el animal. Es tal el respeto a esta especie que incluso durante la época de caza en el país (1950- 1960) había una ley no escrita que prohibía atacarlos.
Este tipo de leopardos son muy raros en este continente, al contrario de sureste de Asia donde son más comunes. Esto se debe a que los bosques tropicales de Asia producen un tipo de sombra que facilita el camuflaje del felino negro, mientras que en la amarillenta Sabana Africana el tipo de ecosistema sólo les permite salir a cazar de noche.
Foto: Will Burrard-Lucas
***
También te recomendamos
Las mejores fotos de Wildlife Photographer of The Year 2018
Aumentó la población de jaguares (y algunas razones para conocer la selva mexicana)
Pingüinos africanos (y otras razones para conocer Ciudad del Cabo)
