La capacidad de recorrer grandes distancias desde las alturas, la extravagancia y los miles de colores que pueden tener sus plumas y picos, ese sentido de la orientación que les permite hacer migraciones cada año o simplemente la gracia con la que llegan a mover sus alas mientras rompen los cielos. Lo cierto es que las aves son unos animales fascinantes de observar.
Por suerte existe un lugar en el oriente de la ciudad que nos permite maravillarnos con estos animales. En el corazón del Municipio de Ixtapaluca, Estado de México se encuentra el aviario “El Nido”, el cual es considerado como el tercero más grande de toda Latinoamérica y es reconocido por su labor de preservación de estos ovíparos y otras especies en peligro.
El tercer aviario más grande de Latinoamérica
Dentro de un espacio de unos 80 mil metros cuadrados, este sitio imitan cinco micro ecosistemas: selva, bosque, desierto, pastizal y pantano. Lo anterior hace posible que aquí vivan alrededor de 3 mil aves de 320 especies de aves diferentes que van desde las más exóticas hasta otras de rapiña.
Este aviario, es además conocido por ser el primer lugar donde se logró la reproducción en cautiverio del quetzal. Este animalito es bastante curioso ya que sólo vive en las selvas selvas tropicales de América Central y es muy difícil que se adapte a otra lugares, lo que ha hecho que poco a poco este espécimen entre a la lista de animales en peligro de extinción.
Los inicios de este santuario
Este lugar fue creado por el ornitólogo, Jesús Estudillo López con el objetivo de conservar aves en peligro de extinción. En un principio el acceso a este santuario era exclusivo para especialistas y científicos interesados en la conservación de estos animales. Sin embargo desde el 2005 el sitio abrió al público por medio de recorridos guiados de aproximadamente una hora.
Durante una visita a El Nido se pueden observar diferentes aves exóticas americanas como cacatúas ninfas, guacamayas, loros, tucanes o pavones piquiazul, un espécimen color negro que cuenta con una cresta ondulada. También es posible admirar calao, turacos, grullas o cuervos , así como aves rapaces como águilas y búhos.
Además de aves, este lugar también se encarga de la protección de otras especies como el jaguar, el mono y el puma. Y todos los ejemplares que habitan en este lugar fueron rescatados o donados por personas que los adquirieron sin permiso.
Ubicación: Calle Progreso S/N, Santa Barbara, 56538 Ixtapaluca, Méx.
Horarios: 10:00 am a 5:00 pm
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