Nuestro bienestar tiene que ver con todos los aspectos que nos conforman: nuestra mente, nuestras emociones, nuestra conciencia, nuestro ser social, nuestro cuerpo, nuestro entorno, nuestras relaciones y nuestro intelecto. El Ayurveda —sistema de curación y bienestar ancestral de India— se acerca al conocimiento de uno mismo como una forma de mantener nuestra salud, pero también de conseguir una vida longeva. Ese mismo objetivo sigue vigente hoy cuando buscamos un camino para ser felices, sentirnos bien y mantenernos sanos.
Hoy más que nunca, el concepto de wellness está relacionado con estar contentos en la vida y hacernos espacios para tener más tiempo de calidad. Tiempo para jugar, para reír y hacer lo que amamos, encaminados a llevar una vida plena con hábitos que nos aportan salud. Los viajes son clave en esa ecuación, pues son el tiempo que nos regalamos para estar bien. Ésta es una pequeña muestra del panorama actual de esas tendencias que, esperamos, sirva de guía a nuestros lectores.
El bienestar en números
Sólo en el Reino Unido, en 2017, la industria del bienestar y la salud alcanzó los 539 billones de libras. De acuerdo con Euromonitor, se espera que para 2021 se dé un crecimiento del 17 por ciento. El mercado de bienestar está creciendo rápidamente. En 2017 alcanzó la cantidad de 680 billones de dólares, lo que representa el 15 % de la industria global del turismo.
El 72 % de los millennials prefieren invertir su dinero en experiencias que en bienes materiales. Para ellos el bienestar es una actividad diaria y están dispuestos a gastar en ella.
Además de los tratamientos de spa, el tema del cambio en la alimentación crece en popularidad, sobre todo, en cuanto a dietas orgánicas y planes de alimentación personalizados. Marcas como Goop, de Gwyneth Paltrow, se han visto beneficiadas de estos consumidores conscientes y han incrementado sus ingresos más del doble entre 2015 y 2016.
Harrods acaba de abrir una clínica de wellness y belleza con 14 cabinas de tratamiento, áreas de entrenamiento y fotografía. Saks, en Nueva York, cuenta también con un espacio dedicado al bienestar. En México, El Palacio de Hierro tiene ya un centro de wellness en su sede en Santa Fe, mientras que Liverpool fue pionero con su spa en la sucursal de Polanco.
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