En el mundo hay pocos lugares tan emblemáticos como el Museo del Louvre. Dentro de este palacio viven miles de obras de arte a través de las cuales pasa toda la historia de la humanidad. Ahí están los vestigios de civilizaciones enteras, los cuadros más icónicos en los que está pintada la historia, basta ver la impresionante Libertad guando a un pueblo de Eugène Delacroix por sólo poner un ejemplo.
Hay tanto que ver en el Louvre, que para recorrerlo no bastan 24 horas; es tan grande que los mismos parisinos no están conscientes de todo lo que se exhibe en us cuantiosas salas. Sin embargo, la fotógrafa española Katy Gómez tomó lo anterior como un reto y realizó un trabajo en el que retrata la esencia de este inmenso museo en tan sólo 12 horas en el Louvre.
Haciendo una oda a la antigüedad del Louvre, todas las imágenes que tomó para la serie son en blanco y negro. Se trata de la captura de momentos irrepetibles que sólo son posibles dentro de este magnífico museo. Uno de los elementos que destaca en muchas de las imágenes es el contraste que existe entre la inmovilidad y eternidad de las piezas pegadas a las paredes y la fugacidad de la vida de las miles miles de personas que todos los días visitan este espacio francés.
Hay que destacar que este proyecto demuestra para encontrar los ángulos y disparos adecuados no se necesita ser un profesional. Y es que Katy Gómez es una veterinaria que aprendió fotografía por cuenta propia y cuya la inquietud de retratar el mundo le bastó para comprar una cámara y recorrer el museo durante 12 horas en busca de instantes que ilustraran el tiempo,a las personas, a París y a su castillo. El resultado de esta travesías por un sólo lugar abarca desde retratos, arquitectura y hasta animales deambulando aquí y allá.
Eventualmente, la serie ’12 horas en el Louvre’ llegó a ojos de los críticos. La española recibió reconocimientos y premios de diferentes concursos internacionales de fotografía, como en el PHotoEspaña, los Travel Photographer of the Year, en el PX3 Prix de la Photographie y en la categoría Nacional de los Sony World Photography Awards 2018.
Sin duda, en el futuro, estas imágenes servirán de referencia en cuanto a la vida del museo, pues la historia del Louvre es larga. Desde que abrió sus puertas al público en 1793, este sitio ha sido testigo de innumerables sucesos históricos, movimientos culturales, cambios urbanos y ha albergado las más valiosas obras de arte y ha recibido a millones de visitantes a lo largo de los años.
También te puede interesar:
Tianjin Binhai: la biblioteca más impresionante del mundo
El primer turista a la luna (ya tiene fecha de despegue)
Para salvar al Guernica…