Tapetes artesanales, bonitos, coloridos y con precio justo
Piezas vanguardistas con responsabilidad social
POR: Karen Martínez
Para poder cambiar el porvenir, todas las sociedades necesitan que los diferentes grupos unan sus talentos y generen nuevas dinámicas de producción. Un ejemplo de esto es el grupo de artesanos textiles de Teotitlán del Valle, Oaxaca, que trabaja de la mano de Bi Yuu, un colectivo que a través de la confección de tapetes fomenta la colaboración y la responsabilidad social. Hablamos de piezas textiles únicas, cuyo diseño narra una historia e invita a la reflexión y a la calma.
Estos tapetes transitan entre lo contemporáneo y lo moderno. Además, presumen pigmentos naturales provenientes de la grana cochinilla, el añil, el marusch, el nogal, el muicle, la granada y el pericón. Son tan especiales que quedan bien en cualquier espacio en el que se les ponga.
Colección 2019
Este año, Bi Yuu presentó sus dos colecciones: Anhelo y Alegoría. La primera se inspiró en el deseo y la esperanza que había al final de los años sesenta en México, específicamenteen las texturas infinitas del op art norteamericano y europeo. La segunda, Alegoría, es más bien una representación simbólica de la filosofía de Bi Yuu, la cual surgió como resultado de procesos experimentales de tejido.
Y es que lo que busca el colectivo es enaltecer la pureza del tejido desde las manos de maestros textiles que han dedicado su vida a los hilos y al telar y que rinden, con su arte, tributo a su cultura, sus creencias y costumbres locales.
Colección Anhelo
Colección Alegoría
Creaciones responsables
Dado que Oaxaca ha sufrido temporadas de sequía que han afectado la obtención de materia prima tintorera entre los artesanos de la región, se busca destinar el uso de pigmentos naturales a producciones de edición especial, no mayores a tres piezas. En cuanto a las fibras, se emplean tejidos de Lincoln, Merino, Nueva Zelanda y algodón de alta calidad que es hilado en México. Todo esto con el objetivo de generar más empleos cuya remuneración sea equiparable al trabajo artesanal de las piezas.
Bi Yuu se fundó en el año 2012 por la diseñadora textil Marisol Centeno bajo la premisa de crear una marca especializada en tapetes y complementos que tuviera una fuerte visión de vanguardia, calidad y responsabilidad social.
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