Hay algo sin igual en un cielo estrellado. La noche se llena de brotes luminosos, que desde hace siglos han sido punto de referencia de navegantes, inspiración para artistas como James Turrell y Van Gogh, e incluso se presenta como el escenario para veladas románticas, acampadas entre amigos y la escapada perfecta para aquellos que buscan alejarse de lo cotidiano.
Ver las estrellas nos permite conocer un poco de aquel universo desconocido que nos rodea; y para disfrutar aún más de esta experiencia tenemos que escoger el mejor lugar para echarnos a contemplar el cielo nocturno. Lo cierto es que lo mejores lugares son aquellos que están alejados de las grandes ciudades y su contaminación lumínica, por lo que son buenas noticias saber que en México existen hasta 176 áreas naturales con protección especial.
El cielo estrellado en Los Cabos
Entre todos estos espacios naturales en el territorio nacional destaca el extremo austral de Baja California Sur, La Península de Los Cabos, ya que es considerada por la NASA como uno de los 20 mejores sitios para observar el cielo nocturno. A 96 kilómetros (poco más de hora y media) de Cabo San Lucas se encuentra Cabo Pulmo; el lugar ideal para escaparse de todo para ver las estrellas.
Se trata de un Área Natural Protegida designada Patrimonio Mundial Natural por la UNESCO, con apenas 200 habitantes y pequeños hoteles que funcionan al 100% con energía solar; así que no hay líneas telefónicas ni señal de internet. Quizá es esa lejanía con la civilización y sus luces lo que ha permitido que el sitio se convierta en el punto perfecto para apreciar la belleza natural del mundo marino y el misterio del cosmos.
¿Qué hacer durante el día?
El atractivo de Cabo Pulmo va más allá de las estrellas, durante el día hay varias actividades por hacer. El buceo y el snorkel son una aventura obligada en la zona ya que hablamos de una reserva marina de más de siete mil hectáreas que contiene la única zona de arrecife de coral duro en el Golfo de California, además de ser el más antiguo con sus 25 mil años de existencia.
Es hogar de más de 300 diferentes especies de peces, por lo que es conocido como “El Acuario del Mundo”. En sus aguas se pueden encontrar cinco de las sietes especies de tortugas marinas en peligro de extinción, varias especies de tiburón, rayas voladoras matarratas gigantes; y de noviembre a marzo, ballenas jorobadas y azules.
Al caer la noche llega el momento de buscar donde acostarnos a ver las estrellas. Una buena opción es Playa El Bajo, ya que se trata de una de las más tranquilas en en la que habitan un sin fin de estrellas de mar. Otra opción es hacer un recorrido en bici por la Montaña del Coyote para encontrar dónde ver el atardecer y el cielo nocturno.