Cristina es italiana y vive en Querétaro. Se casó con un mexicano que conoció en Milán haciendo prácticas con el arquitecto Renzo Piano. Durante el tiempo que vivió en Nueva York estudió en la Fine Jewelry Academy donde le surgió la idea de crear una marca de joyas.
“Empecé a hacer los primeros prototipos de manera muy personal, a experimentar con formas más complejas. Recuerdo haber visto unas fotografías de tatuajes en las muñecas con un mapamundi y haber pensado ‘entiendo lo que quiere decir ese tatuaje’. Es un símbolo universal de amor al mundo de los viajes, de aspiraciones y deseos. Me llamó la atención porque lo sentí muy mío: porque soy de Milán, viví en Australia, Dublín, en Nueva York, ahora estoy en México haciendo mi vida, entonces yo soy parte de eso: nómadas globales”.
A partir de la idea del tatuaje, Cristina creó una pulsera con un mapamundi. Chiara Ferragni, una bloguera italiana muy famosa, vio el prototipo de Cristina en su Facebook y gracias a amistades en común en Milán se lo pidió, y ahí inició el negocio de verdad porque a su página web empezaron a llegar cientos de pedidos.
Para esta colaboración con Travesías, Cristina creó un avioncito. “Es un símbolo que he tenido siempre en la mente. Creo que también es una imagen universal del amor a viajar y pertenecer a un estilo de vida: las personas que invierten su dinero en experiencias y no en algo tangible. Cuando nos propusieron hacer esta colaboración, inmediatamente me vino a la mente un avión. Espero que sea algo que la gente disfrute llevar consigo, que provoque conversaciones: ¿a dónde vas?, ¿de dónde vienes?, tus ambiciones y tus proyectos. También me pareció un símbolo que acerca la joyería al universo masculino porque no es tan femenino, y lo veo más universal. Creo que esa parte puede ser atractiva para la audiencia de Travesías”. Las piezas están disponibles en e_spacio Travesías.
Aquí puedes ver la colaboración de Lorena Saravia realizada para esta edición especial de Travesías.