No hace falta ir muy lejos para sentirse en otro mundo, y estas tres escapadas en Madrid, dentro de la misma comunidad autónoma, son prueba de ello.
El Escorial
El gran palacio/monasterio que construyó Felipe II no es solamente espectacular, sino que además es fresco. Parece un detalle secundario, pero un día de verano en Madrid cuando las temperaturas llegan a los 40 grados, escaparse a disfrutar de la frescura de El Escorial puede salvar los ánimos. Inscrito como Patrimonio Cultural de la Humanidad, el complejo bien vale un día completo de visita. Residencia, panteón de la Casa Real y monasterio, en su interior hay desde obras de Tiziano y Cellini hasta una biblioteca con más de 40 000 libros, además de hermosos jardines. Eso sí, en otoño e invierno es muy frío, pero en ese caso, habría que aprovechar el clima para hacer una reservación en El Charolés (Floridablanca 24), el restaurante más famoso de San Lorenzo de El Escorial y al que muchos le atribuyen el mejor cocido del mundo (sólo sirven cocido lunes, miércoles y viernes).
Foto: AFP
Chinchón
Famoso por su anís, por sus ajos y por su plaza mayor, Chinchón es un pueblito que parece haberse quedado detenido en otro tiempo. En la plaza, de forma irregular, los balcones de madera pintada de verde se convierten algunas veces en los palcos de una irregular plaza de toros. Después de perderse entre sus callecitas estrechas y asomarse a su discreto pero medieval castillo, hay que visitar el antiguo convento de los agustinos que hoy funciona como Parador de Turismo (tienen dos restaurantes muy buenos: El Convento y Tamizia El Bodegón). Lo ideal sería que la visita coincidiera con las fiestas patronales, que se celebran cada año a mediados de agosto, con una animada verbena garantizada.
Foto: AFP
Alcalá de Henares
Hogar de la famosa universidad, fundada en 1499 y pueblo natal de Cervantes, ubicada en la periferia de Madrid, fue la primera ciudad universitaria diseñada en el mundo, parte de la razón por la que la UNESCO la declaró Patrimonio de la Humanidad. A la hora de visitarla, la fachada de la universidad es la obra más emblemática, pero está también el paraninfo, donde cada año se entrega el premio Cervantes, o el majestuoso patio del Colegio Mayor de San Ildefonso. También tiene un barrio moro y uno judío, además del Museo Casa Natal de Cervantes. Para los que se animen a quedarse un par de días, el Parador, situado en el antiguo Colegio Mayor de San Jerónimo, sorprende con una remodelación que combina con armonía arquitectura moderna y antigua.
Fotos: izquierda: AFP. Derecha: Getty
Para ver el mapa completo de Madrid por Travesías, da click aquí.
¿Te gustó esta nota? Suscríbete a nuestro newsletter aquí.
Foto de portada: AFP
***
También te recomendamos:
Travesías 203: un número completito dedicado a Madrid
Una ruta de antojos (dulces y salados) por Madrid
Alpargatas y capas: dos esenciales españoles
