Four Seasons Hotel Madrid: masajes y compras para el viajero incansable

La apertura más esperada de la ciudad 

Desde hacía siglos, en realidad, el hotel ya formaba parte del paisaje urbano madrileño. Ubicado en el punto neurálgico de la ciudad —entre la Puerta del Sol y el Barrio de las Letras—, el flamante Four Seasons se aloja en siete edificios históricos, restaurados y hoy unidos en el Centro Canalejas. La parte más antigua del complejo, originalmente El Palacio de la Equitativa, data de 1887. La espectacular rotonda, rematada con una cúpula de cobre, se yergue sobre la esquina de las calles de Sevilla y Alcalá. 

También impacta la fachada de la oficina principal del Banco Hispano Americano, cuya construcción comenzó en 1902, y que integra la entrada principal a la Galería Canalejas. Inaugurado parcialmente durante la pandemia, este centro de compras representa una nueva apuesta por el mercado del lujo, que coincide con la propuesta del hotel de la cadena de origen canadiense. De hecho, la propiedad en la capital española ofrece una experiencia de compras que comienza en el salón VIP, con servicios exclusivos dedicados a los huéspedes y que incluyen un personal shopper de Galería Canalejas. Si a eso sumamos su cocinero con tres estrellas Michelin —Dani García, al frente del restó homónimo, Dani, en la terraza, frente a la cúpula cobriza de la que hablábamos— y El Retiro, su Spa de cuatro pisos, la oferta resulta insuperable. 

Masajes y cocina molecular

En Dani, se puede degustar tomate nitro y gazpacho verde, el platillo que le valió tres estrellas Michelin al chef marbellí —que antes se desempeñaba en el Gran Meliá Don Pepe, en Marbella—. Se trata de un tomate relleno de bacalao, que luego de pasar por un molde que le da forma, es introducido en una solución de nitrógeno líquido y gelificante. En cuanto al Spa, bueno, ¿dónde empezar? Su oferta de bienestar abarca desde un masaje en pareja (que puede culminar con un baño de a dos en una tina de mármol) hasta la fastuosa alberca climatizada, ubicada en la azotea techada. 

Un templo para el descanso 

Y sin duda merecen un párrafo aparte los masajes anti jet-lag de El Retiro, obviamente bautizado así por el famoso parque, a metros del hotel. Después de un largo viaje en avión, la incomodidad provocada por el cubrebocas y un sinfín de trámites, sellos y esperas, cualquiera soñaría con la cura que promete The Restless Traveler. El objetivo de esta experiencia es minimizar las alteraciones del sueño propias del desfase horario. La aplicación de aire frío, combinado con ejercicios de estiramiento, aromaterapia, aceites esenciales y técnicas de masaje, aliviarán la rigidez e inflamación de los músculos. Y si se trata de procurar el sueño, Four Seasons Hotel Madrid encierra la promesa de un colchón “Signature” —disponible en la tienda en línea global de la marca—, ropa de cama hipoalergénica (hay que pedirla antes del check-in) o edredones y almohadas de pluma.

Revisitar la capital española 

Por último, y a tono con la tendencia de viajes en pandemia, en los que se priorizan las escapadas cortas, Four Seasons Hotel Madrid ofrece un descuento del 15 %  en sus tarifas por habitación, con una estadía mínima de dos noches y con validez hasta el 16 de diciembre. Un dato para quienes ya estén vacunados: las fronteras de España estarán abiertas a todo turista inmunizado (esto es, con el esquema de vacunación completo) con la excepción de quienes hayan recibido Sputnik y Sinopharm, que aún no cuentan con la aprobación de la Agencia Europea de Medicamentos. 

Fotos: cortesía Four Seasons Hotel Madrid.

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