Escapada a Zacatlán de las Manzanas para recoger moras
Desde el 11 de junio y hasta fines de agosto, una finca en Zacatlán de las Manzanas abre sus puertas para que los turistas recojan arándanos azules y los lleven a casa. Hay, además, cabalgatas, talleres de mermeladas y un hotel boutique dentro de la propiedad.
POR: Milagros Belgrano Rawson
“El blueberry —arándano o mora azul— es una fruta al alcance de pocos por su alto precio, que resulta de las cadenas de intermediación. Por eso dedicamos una parte de nuestra plantación a que el consumidor sea quien coseche y pase un día de campo rodeado de bosques, montañas y ríos”, cuenta Federico Núñez Perea, propietario de Finca La Concordia, a un a hora y media del centro de Zacatlán de las Manzanas.
Como ocurrió en 2021, entre junio y agosto la finca organiza el Berries Club Fest, un evento que surgió por la necesidad de desarrollar en la Sierra del Norte de Puebla, “un modelo ecoturístico incluyente y basado en el comercio justo. Queremos que la gente disfrute del sabor y los beneficios del arándano azul en su entorno natural”.
El festival se desarrolla los fines de semana de esos meses, y además de la experiencia de recolectar la fruta que el visitante se podrá llevar a casa, habrá paseos a caballo, convivencia con venados y talleres de mermeladas y ensamble de vinos y licores. Todo hecho con la fruta estrella de la zona, que también ha dado nombre al hotel boutique Frutos del Bosque, que está dentro de la finca y que se prepara para abrir sus puertas en paralelo a la experiencia del “picking”.
“En 2021 fue la primera vez que Finca La Concordia realizó el Berries Club Fest y abrió sus puertas para que el público coseche sus propios arándanos”, cuenta Federico Núñez Perea. La entrada incluye la posibilidad de llevar a casa hasta un kilo de moras azules en el caso de los adultos y 500 gramos en los pequeños. El kilogramo adicional tendrá un costo extra y en ese caso no habrá límite de peso: se podrá cortar toda la cantidad que se desee.
Experiencia inclusiva
Las personas con discapacidad tendrán un descuento del 40% en el ingreso a la finca. De hecho, la accesibilidad a personas con capacidades diferentes es una inquietud de los promotores de esta experiencia. “Queremos ser distinguidos por llevar esta experiencia y los beneficios del blueberry a todos”, dice Federico. Desde las instalaciones de su hotel boutique, que tiene accesos y rampas para sillas de ruedas y baños adaptados para personas con discapacidad, “todos nuestros espacios son accesibles”, cuenta. Para pasear por la propiedad hay, además, un Berrybus, un vehículo eléctrico adaptado para llevar a personas con movilidad reducida y silla de ruedas hasta las plantaciones. “También estamos desarrollando señalización para personas ciegas y capacitando a nuestro personal en temáticas de inclusión e igualdad”, explica Federico, cuya hija tiene discapacidad motriz.
Dueño y promotor de este paraíso que incluye pequeños ríos y bosques ideales para practicar senderismo, Federico está convencido de que “las barreras de todo tipo se deben atenuar, incluyendo, por ejemplo, acceder a un plantío en medio de un bosque siendo usuario de silla de ruedas o pagando un precio justo por un producto de alto valor nutrimental”. A las opciones de alojamiento que ofrece el hotel boutique, se agregan, también dentro de la finca, el Hostal La Masía —que hasta el momento solo alojaba a biólogos que trabajaban en los cultivos— y el área de camping, diseñado para personas con discapacidad motora.
En la finca también hay una tienda en la que se pueden adquirir licores de arándano, moras con chocolate, tisanas de frutos rojos, mermeladas de blueberry, néctares y vino de manzana, entre otros productos de la zona. Durante los días en que esté funcionando la experiencia recolección de fruta, se dictarán, además, talleres de cuidados y manejo de la planta de arándano azul. En esta, un experto en agricultura enseñará las características y cuidados de la planta. El curso incluye una plántula para llevar a casa.