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Florencia es sin duda la capital del Renacimiento italiano. Bajo el auspicio de la familia Médici la ciudad se convirtió en una obra de arte en sí misma. Pero más allá de los museos, esculturas a cielo abierto y palacios hay una gastronomía espectacular y una intensa vida nocturna.
Lo que debes saber antes de viajar
Florencia es la tercera ciudad italiana más visitada por turistas, por lo que es un poco complicado buscar una temporada para visitarla sin verte envuelto por ellos (aunque indudablemente, el verano es la época menos recomendable en ese sentido y también por las altas temperaturas que alcanza la región).
Eso sí, puedes organizar un itinerario que alterne los sitios más visitados (e indispensables) y los barrios menos explorados donde puedes vivir una experiencia diferente y más auténtica.
Lo imperdible
Visita el Duomo (como se conoce a la Basílica de Santa María del Fiore), la Galería Uffizi y el Ponte Vecchio para admirar el corazón renacentista de la ciudad y algunas de sus obras más emblemáticas. Visita el Palacio Pitti (antigua residencia de los Médici en Oltrarno (zona en la que se encuentra la calle Maggio, la más ancha de la ciudad). Recorre la Via Tornabuoni, donde se ubican algunas de las tiendas más elegantes de la ciudad y culmina el recorrido con una comida en Borgo San Jacopo, uno de sus mejores restaurantes.
Cómo moverse
Dentro de la ciudad, uno de los medios de transporte más eficientes y prácticos es el autobús y es con éste como puedes llegar al centro si llegas a la ciudad en tren, cuya estación (Florencia Santa María Novella) está a unos 10 minutos de la Catedral.
El aeropuerto Aregio Vespucci está a sólo 4 km del centro y la forma más simple de trasladarte desde allí es autobús o taxi.