Río de Janeiro

Lo imperdible

Qué hacer en Paraty, la encantadora playa carioca

Enclavada entre el mar y la montaña, entre São Paulo y Río de Janeiro, ésta es una de las ciudades más encantadoras de Brasil.

Es una la ciudades más extraordinarias de Sudamérica. Una urbe enclavada entre cerros, selvas y el Océano Atlántico, que se ha convertido en un referente de América Latina, en la que coexisten modernidad, naturaleza y cultura.

Lo que debes saber antes de viajar

Río tiene dos estaciones marcadas: la de lluvias y la temporada seca. Entre ambas se abre un periodo en el que la ciudad tiene un clima tropical (es decir húmedo y de templado a cálido) con una brisa marina que hace posible gozar del sol y la playa. La época de clima más templado y seco es la de del otoño y el invierno (mayo a septiembre).

Desde el aeropuerto al centro de la ciudad tienes unos 20 km de viaje, lo que hace de los radio taxis la opción más segura (los taxis de la calle no tienen tan buena fama). También existe la posibilidad de llegar por transporte público, pero los transbordos (del autobús al metro) y la congestión de viajeros puede hacer el trámite muy poco placentero.

Una variante que puede alterar todos los precios es el carnaval, famoso y emblemático, de Río. Si viajas en esa temporada, prepárate para que los costos de traslados (entre otros) aumenten.

Las opciones de hospedaje son múltiples, dependen de la zona que prefieras. La playa Copacabana, un clásico preferido por muchos, cuenta con buenos hoteles como el Copacabana Palace, mientras que en Ipanema (otra playa preciosa) está el hotel Fasano. Siguiendo con las zonas costeras, el Sheraton Barra, en la zona de Barra da Tijuca, no se queda atrás, al estar en una de las mejores zonas para probar la gastronomía carioca.

Lo imperdible

El Cristo del Corcovado, esta estatua art déco de 38 metros de altura (sobre un pedestal de 8 metros) es indisociable de Río.

Los Arcos de Lapa, construidos en 1750 como un acueducto, conectan el centro de Río de Janeiro con el Morro Santa Teresa y son uno de los principales marcos arquitectónicos de la era colonial.En esta zona se concentra parte de la vida cultural de Río, entre museos, circuitos de arte y comercio artesanal los fines de semana.

La Plaza Mauá, en la Zona Portuaria, es parte de lo que ha sido rebautizado como “Puerto Maravilla”, una zona antigua que fue testigo de hechos doloroso, como el tráfico de esclavos en los siglos XVII y XVII, pero también de la emergente cultura carioca, razón por la cual ha sido (y se sigue) renovando para ofrecer a los viajeros una mezcla de espacio histórico, cultural y de recreación.

 

El Jardín Botánico es un viaje de ida. Fundado a comienzos del siglo XX, está considerado entre los más grandes y diversos del mundo. Allí podrás ver nenúfares gigantes del Amazonas y decenas de especies de orquídeas.

No puedes irte de Río sin visitar algunos de los más emblemáticos de sus (muchos) museos, empezando por el Museu do Amanhã, dedicado a la ciencia y cuya arquitectura asombrosa se la debe al famoso arquitecto español Santiago Calatrava. Otras paradas ineludibles son el MAR (Museo de Arte do Río) y el MASDARTE (Museu Nacional de Belas Artes de Río de Janeiro), para conocer parte de la historia cultural y estética de esta ciudad.

 

Cómo moverse

Río tiene un buen sistema de Metro y autobuses que recorren casi todas las rutas. Sin embargo, una vez entrada la tarde-noche, se recomienda evitar sobre todo los autobuses, dado que muchas veces no son muy seguros (en particular durante las horas oscuras).

Existe la posibilidad de rentar un coche, aunque la señalización confusa para los foráneos (más el hecho de que está en portugués) puede hacer que termines enmarañado en el tráfico. Nuestra recomendación es que para los trayectos de tarde y noche (y cuando el calor asedie durante el día y no logres subirte a un autobús de los que tienen aire acondicionado) simplemente tomes un taxi o un Uber.