Viajes y tecnología: de la nostalgia a la experiencia personalizada

Los viajes ahora son cada vez más sencillos de planificar, organizar y llevar a cabo, en gran medida, gracias a la tecnología. Pero ésta no sólo interviene en forma de motores de booking o de apps de movilidad. Cada vez está más presente en la personalización de las experiencias y para revelarnos todo sobre un destino mientras lo recorremos. 

En el tercer episodio del Foro Travesías presentado por Audi y dedicado a la tecnología y los viajes, contamos con la presencia de tres expertos: Mario Molina, director regional del Programa de Referidos de Cloudbeds, una plataforma tecnológica para la hospitalidad que apoya a hoteles independientes, Rodrigo Garza, socio fundador y director comercial de Nuba México, agencia especializada en viajes a la medida y de aventura, turismo receptivo y wedding planners, y Patricio González, editor de Unocero, portal especializado en tecnología de consumo. La conducción estuvo a cargo de Felipe Restrepo Pombo, periodista, escritor y editor colombiano quien dirige las oficinas de Capital Digital en su país. 

Pandemia y cambio de paradigmas

Uno de los hechos que más nos impresionaron de la pandemia fue cómo aceleró la digitalización de, incluso, los hospedajes y restaurantes más remotos. Si hasta antes de 2019 existir en el mundo digital consistía en poseer una marquita en el mapa de Google maps y un par de fotos, teléfono y horarios de atención, quien hoy sólo se limita a esto es considerado casi invisible. 

Molina, quien durante los últimos 14 años trabajó en travel tech, comenta que, sin embargo, muchos hoteles aún tienen miedo de subirse al tren de la digitalización debido al desconocimiento, pero que su labor consiste también en educarlos respecto a las ventajas, así como a las prácticas de las grandes marcas, para que puedan competir con ellas. 

Respecto a este tema, el directivo de Cloudbeds sostiene que el mayor reto es que el viajero está yendo mucho más rápido que la industria de la hospitalidad en la adopción de nuevas tecnologías y prácticas relacionadas a éstas.

“Más del 50% de los viajeros está usando el medio digital. El lujo ahora también incluye qué experiencia tengo a través de mi proceso de reserva”.

Mario Molina

Molina considera que, en cuanto a la industria, “México, está muy bien posicionado en términos de adopción tecnológica, si bien hay una brecha que acortar, pero la evolución ha sido constante”. 

Rodrigo Garza cuenta que, pese a que Nuba se considera una agencia tradicional, han ido adaptándose a la digitalización a toda innovación que pueda facilitar, despejar y enriquecer la experiencia del viajero.

“Nosotros somos asesores de viaje y nos hemos metido mucho más en el lujo y en experiencias como ir a ver los gorilas en Ruanda y temas específicos. Y puede ser que el mismo cliente que te pide esa experiencia luego se vaya con su familia a Miami y haga todo el proceso de booking por su cuenta por medio de las plataformas, así como millennials que prefieren que incluso en esos casos lo hagamos todo nosotros”. 

Las puertas abiertas a la adopción tecnológica

Un hecho que mencionaron los panelistas fue cómo en el caso particular de México, la pandemia produjo una digitalización incluso en sitios antes remotos.

“Siento que México se adaptó muy bien a todas las plataformas tecnológicas internacionales”, opina Garza, y explica cómo, desde su punto de vista, la decisión del gobierno de México de no cerrar las fronteras, que resultó tan polémica en su momento, fue la que salvó a la industria del turismo local.

“Hoy en día los hoteles están al 100% y ahora que los países asiáticos se están abriendo hasta miedo te da ofrecer un hotel porque no sabes en qué condiciones va a estar; vemos todo lo que está sucediendo en los aeropuertos de Europa”.     

Patricio González coincide en este punto: “precisamente como México fue uno de los pocos países en seguir abiertos al mundo, hizo que esos hoteles que quizá se iban más a lo tradicional se dieron cuenta de que necesitaban una presencia online, dando la oportunidad a pequeñas y medianas empresas para aumentar su afluencia de turistas de distintas partes de México y el mundo”.  

Al respecto, Molina cuenta que una tendencia que creció durante la pandemia fueron los viajes a no más de 500 km a la redonda, lo que llevó a que hoteles de destinos como la Riviera Maya se concentraran en captar viajeros de Estados vecinos. Y en esto, nuevamente, participó el uso de la tecnología, en particular de la publicidad en redes sociales vía geolocalización.  

Viajes en el multiverso

Una duda que ronda la conversación entre los expertos en viajes es qué tan vívida es la experiencia del multiverso y qué tanta probabilidad existe de que, eventualmente, reemplacen a los viajes físicos. 

González, como buen experto en gadgets, mostró algunos de éstos que se encuentran aún en una etapa muy precoz pero que vaticinan cambios grandes en la industria, en particular con respecto al uso de la realidad aumentada y la realidad mixta.

“El metaverso ahora lo tenemos como un medio de experimentar la realidad virtual con el Oculus (un visor de RV), pero ¿cómo llevarlo a una experiencia en el mundo físico? Ahí es donde entra esta idea del metaverso en el que va a expandir la realidad por medio de gadgets como los lentes Ray Ban Stories”.  

Patricio González

Estos lentes, creados en asociación entre la marca y Meta, llevan integrados una cámara que permite filmar lo que se está viendo, pero la intención es que en un futuro próximo puedan además ofrecer información (datos interesantes, recomendaciones de lugares, GPS y rutas de navegación) sobre lo que se está observando, por medio de pantallas integradas.       

Mientras que, por un lado, el viajero podrá tener una experiencia de realidad mixta al visitar los destinos, por el otro las compañías hoteleras y promotores de destinos podrán ofrecerles una experiencia previa en el metaverso para que tomen su decisión de compra. 

En conclusión, la tecnología ha llegado para fortalecer la industria de los viajes, cuyo futuro resulta más promisorio que nunca. Tanto por medio de los dispositivos y la digitalización (y el uso inteligente del big data) que ayudan, a su vez, a crear experiencias más personalizadas y a optimizar los accesorios para no cargar con más de un dispositivo que lo resuelva todo, los viajeros encontrarán incluso destinos que hasta el presente no están mapeados, como podrían ser los viajes espaciales.

Lo cierto es que, en toda la ecuación, el viajero sigue en el centro, y que la tecnología unida al contacto humano seguirá siendo la pauta en los próximos años.