La historia detrás de Very Feliz

Very Feliz, la marca de ropa cómoda, para todos los géneros y edades, es la respuesta a una pregunta de Juana, hija de Vera Félix: “Mamá, ¿por qué la ropa de niños es más divertida que la de niñas?”.

“Yo quería que mi hija creciera sin esa división entre ropa de niños y niñas. Todo empezó con una sudadera, porque en Ciudad de México siempre necesitas una o traes alguna por ahí metida”, me cuenta Vera mientras recorremos su pequeña tienda en una esquina de la calle Marsella, en la colonia Juárez.

El principio de Very Feliz

A esa primera sudadera que llevaba la leyenda “Very Feliz” (un juego de palabras que se desprende del nombre de Vera Félix) la acompañó el resto de los elementos que hoy integran la marca: prendas básicas, varios colores, diseños atemporales, buena calidad de tela y una producción justa. Toda la ropa está hecha 100 % de algodón, en una fábrica en Ciudad de México, donde trabajan principalmente mujeres con materias primas mexicanas. La producción es pequeña para evitar el desperdicio.

El nacimiento de la marca ocurrió durante los tiempos pandémicos; para ser más precisos, en diciembre de 2020. En ese momento, cuando todos estábamos en casa y priorizando el confort, Very Feliz resultó perfecta no sólo para niños, sino para adultos también. “No me imaginaba que a la gente le fuera a gustar tanto la idea de traer algo puesto que dijera Very Feliz. Claro, era un mensaje optimista en tiempos difíciles y creo que eso ayudó mucho”, relata Vera. Así que la línea de ropa para jugar integró también tallas para adultos, pero conservó el espíritu de diversión y libertad.

Para niños… y adultos también

A Vera le sorprendió que los adultos quisieran ser parte de su propuesta, sin embargo, la pandemia nos acostumbró a usar ropa cómoda y nos permitió flexibilizar un poco (o mucho) las reglas de vestimenta en todos los sentidos, y la creadora de Very Feliz lo sabe: “La realidad es que también es una tendencia que se dio a escala global y entre marcas de lujo, que diseñaron sudaderas y pants que no tenían antes”.

Los colores

Van cambiando según la temporada. “Busco inspiración en el arte, en la ciudad, que tiene tantos colores diferentes en las paredes. Y de ahí voy añadiendo ciertas colecciones”, menciona. Las prendas son las mismas, pero de pronto sacan nuevos productos: trajes de baño, bolsas, gorras.

La tienda física

El primer año de la marca únicamente tenían la tienda en línea. Pero, al cumplir dos años, Vera cuenta que “la ciudad se empezó a mover, después de la pandemia la gente volvió a las calles, tenían ganas de una experiencia de compra física”. Así que se aventuró a poner un pequeño espacio físico en la colonia Juárez, para que los clientes que ya tenían pudieran vivir una experiencia de compra distinta y quienes pasaran por ahí los conocieran también.

El futuro de Very Feliz pinta muy bien. Hay la intención de volver internacional la marca, de ir a algunas ferias de ropa para niños y diversificar un poco más sus colecciones, aunque siempre manteniendo el espíritu de la comodidad y del juego.