Acabamos de estar unos días en el Shangri-La de Londres, convenientemente ubicado en The Shard, entre los pisos 34 y 52 para ser exactos. Aunque podríamos decirles muchísimas cosas del hotel, hay una palabra que uno repite constantemente durante su estancia: vistas, vistas, vistas y más vistas.
La torre de cristal, obra de Renzo Piano —sí, otra vez— es por ahora el edificio más alto de la Unión Europea, se encuentra al sur de la ciudad, cerca del Tower Bridge, y es el mejor punto para observar la ciudad.
Desde el bar, al que se puede acceder como visitante y disfrutar de un delicioso Bloody Mary, se tiene la mejor vista de The City, incluido The Gherkin y el Edificio Lloyd’s, ambas obras de Norman Foster. También está el Walkie-Talkie, obra del español Rafael Viñoly y la Torre de Londres que, francamente, parece una miniatura comparada con las modernas construcciones del este de Londres.
Si alguien tiene la buena fortuna de dormir en Shangri-La, las modernas habitaciones ofrecen la misma vista, desde donde es posible quedarse horas disfrutando de la ciudad desde lo alto. Aunque, eso sí, la mejor parte está en el gimnasio y en la alberca.
No somos los únicos que nos hemos enamorado del Shangri-La, pues suele estar lleno desde su apertura. Y es que la combinación de un gran servicio, hermosas y comodísimas habitaciones y vistas para morirse es mucho más de lo que uno puede pedir. Tomen nota para su próxima visita.
Tres razones más para quedarse aquí
Está lejos de las zonas turísticas alrededor de Hyde Park.
El Tate Modern te queda a unos pasos.
Muy cerca está la zona de Barbican, donde se esconden algunos de los mejores restaurantes de la ciudad.
Shangri-La Hotel at The Shard 31 St Thomas Street, Londres, T. +44 (20) 7234 8000, shangri-la.com/london
