Para admirar la belleza geográfica de este territorio, recomendamos un paseo en aerostático. La aventura comienza a las cinco de la mañana, cuando el equipo de Vuela en Globo pasa por los viajeros hasta su hotel para llevarlos al punto de despegue. Nosotros los seguimos en nuestro KIA Optima, cuyo interior proporciona confort a todos los pasajeros.
Las mañanas suelen ser frías, pero es la temperatura perfecta para lograr que los globos se eleven. Por lo regular se alcanza una altura máxima de 50 mil pies (alrededor de 15 mil 240 metros), se pasan las nubes y se tiene una espectacular vista del amanecer.
En el aire, el aerostático flota siguiendo la ruta del viento y se observan los techos de diminutas casas, así como los trazos de algunos pastizales y sembradíos.
En ocasiones, el globo se ve reflejado entre las nubes, y si hay más aerostáticos se puede ven cómo uno va tras de otro flotando casi en la misma dirección.
El tiempo se pasa volando, es casi una hora que te permite ver las mejores postales de la localidad.
Una travesía que bien vale un #KIATravel.
