Es una emoción ambivalente: comenzar un año nos da optimismo y vigor, pero no deja de lado la nostalgia. Sabemos que son ciclos de transformación, tanto colectiva como individualmente y es inevitable mirar hacia atrás y ver lo que hemos dejado en el pasado. Son esos momentos en los que más se necesita un momento de confort para el regreso a nuestras actividades diarias y hacerle frente con toda la actitud a todo lo que nos tiene preparado este año.
Por ejemplo, entrar a tu cafetería favorita con un nuevo libro en mano, con la emoción que da encontrarte ante una historia hasta ahora desconocida siempre será mejor si se acompaña de un sabor reconfortante como el del clásico Chai Latte que despierta todos nuestros sentidos y nos brinda una sensación de arropamiento sin igual, otorgándonos calor y bienestar al cuerpo.
Ante una mañana soleada, y si tienes una predilección por las bebidas heladas o frappuccino, la mejor opción es el Chai Frappuccino o el Chai Latte Helado. Y, como mencionamos antes, estos primeros días del año son momentos perfectos para experimentar y aprender algo nuevo, por lo que personalizarlas con la variedad de leches vegetales que ofrece Starbucks es una buena oportunidad, como la de almendra, soya o avena —sobre todo en estos días en los que todos tenemos el propósito de ponernos un poquito a dieta.
Cualquiera de las leches vegetales que escojas se integra de manera perfecta a los sabores del Chai, sin irrumpir en el protagonismo de su delicioso sabor, sino como un suave acompañamiento. Un toque de novedad que es justo lo que necesitamos disfrutar mientras damos forma a todos los planes que queremos realizar en los meses que quedan por venir.
