La vitivinicultura en México se fortalece año con año: más premios internacionales, mejores y más populares vendimias, y cada vez más zonas de viñedos. De acuerdo con Daniel Sada Marroquín, promotor del proyecto Toma Vino Mexicano, su consumo en nuestro país se ha duplicado en los últimos 10 años.
Las fiestas anuales de la cosecha de la uva, también conocidas como vendimias, se realizan en viñedos de todo el mundo a finales de julio y durante agosto, dependiendo de la región, la uva y los enólogos. Son eventos muy esperados que requieren de reservaciones anticipadas y una buena planeación del trayecto, en especial si se desea visitar el Valle de Guadalupe en Baja California.
Aunque una vendimia es el evento más fastuoso del año, para muchos no es la mejor época para visitar un viñedo. Las semanas previas a la fiesta pueden ser más convenientes, en especial porque permiten la oportunidad de disfrutar de hermosos paisajes verdes, con los parrales llenos de uvas, en un entorno apacible.
Restaurantes de primera calidad, hoteles boutique y actividades culturales. Esta ruta lo tiene todo, incluida una gran infraestructura de tours y paquetes para que planear una escapada sea lo más sencillo. Hay que volar a Tijuana y de ahí tomar la carretera Ensenada-Tecate, donde comienza la conocida Ruta del Vino. Una buena opción es rentar un auto en el aeropuerto o pedir un Uber, que para los usuarios nuevos tiene el código DescubreBC y que regala 200 pesos de crédito para el primer viaje.
Los viñedos están divididos en tres rutas, la Ruta Central, con viñedos como Adobe Guadalupe, Alximia, Bodegas Santo Tomás, Encuentro Guadalupe, y L.A. Cetto; la Ruta Sur, con Concierto Enológico, Vinícola Rincón de Guadalupe, y Viñedos Palafox; y la Ruta Norte (Tecate), con Vinos Tanamá y Cava Los Nietos de Doña Inés.
2. Ezequiel Montes
Una zona mucho menor en cantidad, pero no por ello en calidad. Esta región queretana tiene dos casas vinícolas, Freixenet y La Redonda, que ofrecen excelentes etiquetas y amenas experiencias gastronómicas en sus viñedos. A menos de 200 kilómetros de la Ciudad de México, funciona como una gran escapada de ida y vuelta para un fin de semana.
3. Guanajuato
A las de por sí atractivas San Miguel de Allende y Guanajuato las divide la espectacular Sierra de Santa Rosa que habrá que cruzar para recorrer este creciente Circuito del Vino, conformado por Bodega Dos Búhos –a 15 minutos en coche del centro de San Miguel de Allende–, Vinícola Toyan y Cuna de Tierra. Por su ubicación, son una opción de fácil acceso a muchas ciudades del centro del país, incluidas la Ciudad de México, León, San Luis Potosí o Morelia.