Consejos para viajar por México en tiempos de COVID-19

¿Se puede viajar?, ¿A dónde se puede ir?, ¿Es mejor ir en coche o en avión? Hay muchas dudas en torno a los viajes en medio de la pandemia del COVID-19. Un viaje puede ser tan riesgoso como el turista lo desee. Pero también hay que considerar que a veces quienes están en mayor riesgo son los miembros de la comunidad que nos recibe. Como viajeros, debemos ser muy conscientes que nuestra responsabilidad no sólo está en cuidarnos a nosotros mismos, sino también mitigar los riesgos para la población del lugar al que llegamos. Si bien cada caso es particular, y se debe revisar según las condiciones del viaje, compartimos esta serie de recomendaciones generales para que aquellos que decidan  viajar por México.

Como viajeros, nuestra responsabilidad no sólo está en cuidarnos a nosotros mismos, sino también en mitigar los riesgos para la población del lugar al que llegamos.

A dónde ir

Hasta que la crisis sanitaria haya sido controlada, la recomendación es evitar destinos (o actividades) con aglomeraciones de personas. Más que una limitante, es la oportunidad de abrirle la puerta a lugares más remotos y solitarios que, probablemente, antes no habrían figurado en la lista de posibles vacaciones. Ahora más que nunca, la economía de algunos destinos dependen de la reactivación del turismo.

Una consulta antes de elegir el destino

Cada caso es diferente; hay gente que pone en mayor riesgo su salud haciendo cierto tipo de actividades que para otros no representarían un riesgo tan alto. Una consulta, incluso por teléfono, con el médico puede aclarar el panorama de qué se puede y qué no se puede hacer.

Investigar antes de reservar

Así como la ubicación, el precio y la disponibilidad de fechas son factores elementales que hay que considerar antes de hacer una reservación; de ahora en adelante también será importante tener en cuenta las medidas sanitarias y restricciones que llevan a cabo los hoteles, restaurantes y destinos que se planea visitar.

Necessaire COVID-19

Hay que considerar que la maleta va a tener nuevos ítems que, probablemente, antes no habríamos empacado:

Más de un tapabocas reutilizable.

Más de una botella pequeña de gel antibacterial distribuidas en diferentes lugares (el auto, una chamarra, la mochila, etc) para tener a la mano todo el tiempo.

Llevar un paquete de toallas sanitizantes.

Considerar llevar un calzado extra, designado específicamente para uso en espacios públicos.

Espacios abiertos

Según los expertos, frecuentar espacios abiertos es más seguro que los cerrados por cómo se comportan las partículas que pueden portar el coronavirus. Factores como guardar la sana distancia y evitar ponerse en donde haya una corriente de aire que provenga de un grupo de desconocidos son muy importantes para evitar el contagio. Esto aplica en playas, parques o cualquier espacio abierto.

No correr riesgos innecesarios

Es común que en un viaje sucedan accidentes. Esto obliga a las personas a frecuentar hospitales o consultorios de doctores, focos rojos de infección en estos momentos. Hay que evitar hacer actividades extremas o juegos que puedan ocasionar accidentes en niños.

Viajar en carretera

El coche se perfila como una de las mejores maneras de viajar en lo que se encuentra una vacuna para el COVID-19; eso implica elegir destinos no tan alejados del hogar. Sirve entenderlo como una burbuja que hay que procurar no romper hasta llegar al destino: si es necesario bajarse en algún momento, hay que lavarse las manos y desinfectar el calzado antes de subir para no comprometer la higiene del auto.

Viajar con mascotas

De la misma manera que hay que desinfectar el calzado, si un perro caminó por superficies que pudieran llegar a ser consideradas focos de infección, hay que limpiar sus patas con agua y jabón. Hay que consultar al veterinario, ya que hay productos como el cloro que pueden llegar a lastimar al animal.

Medidas post viaje

Mientras que la responsabilidad del viajero durante su vacación es con la comunidad que lo acoge, a su regreso toca hacer lo mismo con quienes rodean su hogar. La recomendación es intentar no salir durante 14 días para asegurarse que nadie se enfermó durante el viaje y que el virus no se propague aún más.