Hay algo sobre los trenes que cautivan a todos los viajeros. Por supuesto, no faltan las historias y películas que los han romantizado. También está la rapidez con la que los pasajeros recorren largos trayectos y la comodidad de poder hacerlo mientras duermen, en vagones cama. Eso sin mencionar que muchas veces son la opción de transporte más barata y ecológica. Pero, aunque últimamente han surgido varios proyectos y algunos incluso se encuentran en construcción, viajar en tren por México ha caído en un desafortunado olvido.
Tras décadas de un esplendor ferrocarrilero impulsado en los años del Porfiriato, la mayoría de las vías en el país han quedado relegadas a una función mercantil. De ser un sistema de clase mundial, ahora prácticamente no existen trenes de pasajeros. Sin embargo, aún hay unas pocas formas de viajar en tren por México que son imperdibles para viajeros nostálgicos.
El Chepe Express
Ruta: De Los Mochis a Creel
Quizá el tren de pasajeros activo más famoso en México. El Chepe Express es la mejor forma de recorrer las Barrancas del Cobre. El camino entre sus cinco estaciones atraviesa los estados de Sinaloa y Chihuahua, dejando vistas espectaculares que parecen sacadas de un western. Las paredes de piedra van cediendo a los acantilados y, conforme avanza por los 350 kilómetros y las nueve horas que dura la ruta completa, parece que el paisaje va mejorando.
La idea es ir bajando en cada una de las ciudades en donde se detiene el tren, para dar una vuelta por sus alrededores y pasar la noche. Así es posible conocer de cerca el escenario natural que va desfilando por la ventana durante todo el viaje. En algunas paradas encontrarás lagos, cascadas, y enormes tirolesas para adentrarse a las Barrancas.
En realidad, no hay una fecha específica para hacer el viaje. Si vas en verano probablemente encontrarás el mejor clima para pasear sin problemas. Pero si tomas el tren en invierno, puede que te encuentres con nieve por el camino, lo cual lo hace una experiencia muy diferente a cualquier otro viaje por México.
Dentro del tren encontrarás servicio de carro bar, con cócteles, y restaurante, con un menú para conocer los sabores de la región. El Chepe Express ofrece tres diferentes tipos de vagones, dependiendo de la clase, y los precios van desde los 4,151 pesos hasta los 7,383 pesos por el viaje redondo por la ruta completa.
Tequila Express
Ruta: De Guadalajara a Tequila
Más que un viaje en tren, este plan es una experiencia diseñada para los amantes del tequila. Bueno, también para los no tan amantes. En realidad, el trayecto entre Guadalajara y Tequila dura sólo una hora y media y, sobre todo, es un pretexto para lo que espera después de la estación.
Varias casas tequileras, como José Cuervo o Herradura, tienen estos trenes para organizar visitas guiadas de sus campos de agave y ofrecer catas en el lugar. Además de ser una gran oportunidad para conocer más sobre el que quizá sea el trago mexicano más famoso, también sirven para darte una vuelta por el famoso pueblo de Tequila.
Las tarifas van desde los 2,800 pesos, hasta los 3,800 pesos y varían dependiendo de los servicios que incluye la experiencia y la comodidad de los vagones. Todos cuentan con catas en los campos de agave, pero algunos, como el vagón elite de José Cuervo, además tienen barra libre durante el viaje o comidas incluidas a la llegada.
Tren Turístico Tijuana-Tecate
Ruta: De Tijuana a Tecate
Los caminos de Baja California son amigables para recorrer en auto. Buenas carreteras, con pocas curvas y grandes paisajes hacen que moverse por la península sea relativamente fácil. Sin embargo, viajar en tren es otra opción. Entre las ciudades de Tijuana y Tecate corre uno de los últimos trenes para pasajeros en México y, aunque puede que no sea la vía más popular de la lista, no deja de ser imperdible.
El recorrido de aproximadamente dos horas y media conecta ambos puntos turísticos de Baja California Norte, en un viaje panorámico por el desierto. Antes de llegar al destino final, los pasajeros pueden descender en la parada de la presa Abelardo L. Rodríguez para acercarse al agua y a las montañas desde un mirador. Pero, lo mejor es irse moviendo entre los diferentes vagones del tren para conocer un poco de la cultura de la región. En lo que llegas encontrarás obras de arte, música, queso y vino típicos de la zona.
Una vez en Tecate, habrás llegado al único pueblo mágico fronterizo y el mejor inicio para una ruta del vino por el famoso Valle de Guadalupe. Como se podría intuir, este fue el hogar de nacimiento de la famosa cerveza y está sumido entre el paisaje rocoso de La Rumorosa.
El tren sale todos los días a las 9:00 de la mañana, desde la estación García, al sur de Tijuana y espera cuatro horas a que los pasajeros den la vuelta por Tecate antes de regresar. Aunque es más que suficiente para conocer la ciudad, también puedes pasar la noche o justamente tomarlo como punto de partida para empezar tu viaje por la región vinícola de Baja.