Imagina estar en medio de la selva maya mientras admiras el agua color turquesa del río, escuchas el canto de las aves volando en su hábitat natural y sientes la fuerza de los frondosos cedros que te rodean. Un mejor espectáculo para reconectar con la naturaleza, imposible.
La Selva Lacandona es uno de los sumideros de carbono más importantes de Mesoamérica y es el lugar indicado para practicar ecoturismo.
Hace ocho años los indígenas tzotziles y tzeltales que habitan en Maravilla Tejenapa decidieron abrir un centro ecoturístico para aprovechar los recursos naturales de la selva y, al mismo tiempo, compartir con los viajeros conocimiento sobre el cuidado del medio ambiente y la importancia de preservar la selva.
Ahora, Causas Verdes Las Nubes es uno de los centros más populares para practicar ecoturismo dentro de la Selva Lacandona.
Un cachito de cielo
A 120 km de distancia de Comitán, Chiapas, se localiza el centro ecoturístico que tiene como principal atractivo al río Santo Domingo.
El color azul turquesa de su agua se debe a la presencia de algas, microorganismos y la disolución de rocas de cal con carbonato de calcio; además de la vida orgánica en su interior y el reflejo de la luz natural del sol. En conjunto con la densa vegetación a su alrededor, el río crea un espectáculo visual digno de admirar.
El río tiene distintas caídas de cascadas que, gracias a la fuerza de la corriente, crean una intensa neblina sobre ellas y es por este efecto que recibe el nombre de Las Nubes.
La mejor temporada para visitar el lugar es de noviembre a marzo, a pesar del calor y la humedad de la selva, esa brisa en el rostro se siente como estar en el paraíso. El resto del año es temporada de lluvias y es prácticamente imposible caminar cerca del río.
Río abajo la corriente presenta cascadas y , entre ellas, hay un puente colgante que te lleva al otro lado del río de forma segura. Puntos extra por la vista panorámica desde aquí (es el momento perfecto para tomar fotografías desde lo alto).
El sendero está muy bien señalizado y te ofrece distintas posibilidades, como acercarte a la corriente a la que llaman “la licuadora”, porque tiene la capacidad de jalar miles de metros cúbicos de agua por segundo, lo cual resulta bastante peligroso si te acercas demasiado.
Más adelante encontrarás “Las Golondrinas”, otra cascada donde este tipo de aves vuelan alrededor y -con suerte- podrías escuchar su canto.
En contacto con la vida silvestres
Las Nubes se encuentran a 308 metros de altura sobre el nivel del mar y en su cima están los cedros más grandes y frondosos de la región.
En el camino para llegar a la punta de este cerro podrías tener suerte y encontrar jabalíes, tucanes, azulejos, colibríes y algunos tejones.
Además de cedros, en la selva hay caoba, palo de rosa, bali, bromelias y orquídeas.
A dos horas y media del centro ecoturístico Las Nubes, está otro parque ecoturístico destinado a la conservación de las guacamayas rojas, especie en peligro de extinción, que ahora, sólo puede encontrarse en esta región de México.
Una completa desconexión
En esta zona no hay señal de teléfono y, mucho menos, Wi-Fi. Sin duda, es el lugar perfecto para una completa desconexión tecnológica.
Sin embargo, Las Nubes Chiapas posee un espacio con cabañas eco para aquellos viajeros que quieren vivir la aventura natural sin perder la comodidad -y la desconexión-, así como un espacio de camping para los viajeros más aventureros.
El centro cuenta con cabañas de lujo, Wi-Fi, un espacio limitado para nadar -porque la corriente puede ser muy fuerte- y, por supuesto, un restaurante con comida tradicional mexicana.
También ofrecen distintos tours y actividades -además del senderismo- que puedes realizar durante tu estancia en la Selva Lacandona. Desde rafting hasta recorridos nocturnos por la selva y espeleología. Para más información sobre los paquetes y servicios, puedes enviar un correo electrónico a [email protected].