A menos de dos horas de Santiago Nuevo León se encuentra el cañón de Matacanes, un espacio perfecto para los amantes del ecoturismo, los deportes extremos y las aventuras en medio de las montañas. Entre resbaladillas naturales, saltos y cañonismo la adrenalina, te acompaña en cada paso que das.
Matacanes forma parte de los cañones de Santiago que se encuentran dentro de la zona natural protegida del Parque Nacional Cumbres de Monterrey. El nombre de Matacanes está inspirado en las formaciones rocosas porosas de origen calcáreo (estructuras formadas principalmente por carbonato de calcio) que lo componen y que tienen forma de regaderas a las que originalmente se les llamaba “matacanes”.
El agua pura que nace a dos mil metros de altura, los pinos y encinos, el vuelo de los halcones mexicanos (si tienes suerte de verlos), el sonido de las serpientes cascabeles grises y las cuevas atravesadas por el río son sólo una parte del cañón que ha sido calificado -por sus visitantes- como uno de los más espectaculares del mundo.
Una aventura entre saltos y montañas
Para llegar a Matacanes es necesario contar con un vehículo todo terreno ya que el camino es sinuoso.Te recomendamos visitar la comunidad Potrero Redondo para desayunar y equipartse para comenzar la ruta.
También es buena idea contratar un tour guiado con Gaia Xtreme, Aventuras Remotas o Aldea Matacanes, para que cuentes con el apoyo de un guía certificado, experto en el camino y que cuente con el equipo de seguridad para practicar rappel, nado y cañonismo.
El recorrido puede durar entre cinco y diez horas, dependiendo de tu ritmo, la cantidad de saltos que desees realizar y el tipo de experiencia que hayas contratado.
La caminata inicia con trayecto de más de una hora en medio del bosque de coníferas de la Sierra Madre Oriental, hasta llegar al primer salto, tras el cual se halla la primera cascada desde la que desciendes 27 metros en rappel. Allí atraviesas senderos semiacuáticos y veredas naturales, y puedes beber agua purificada por la piedra caliza para recuperar las energías, ya que el recorrido continúa hasta alcanzar los toboganes naturales que se forman entre las venas de la montaña.
El acceso a la primera cueva a visitar es, una vez más, por rappel. Después, llegan más toboganes naturales y más de 25 saltos que van desde el metro hasta los 12 metros de altura.
Una cama de piedra se convierte en el tobogán natural más grande del lugar. Deberás continuar algunos metros más para atravesar la segunda cueva donde la luz del sol nunca cruza; al salir, la luz del sol se fusiona con el agua y las rocas creando un intenso color verde esmeralda en el río.
Al alcanzar este punto sólo queda ir al sendero y caminar de vuelta a Potrero Redondo.
Vivir Matacanes
Algunos consejos extra para aprovechar Matacanes al máximo son:
- Cuidar y respetar la naturaleza, no dejar basura en el camino y si encuentras algún resto en el sendero, llevarlo contigo.
- Utilizar un traje de neopreno para proteger a tu cuerpo y piel del agua fría de las montañas. Puedes llevar el tuyo o rentar uno con el tour que contrates.
- Nunca quitarse el casco ni el chaleco salvavidas.
- Llevar zapatos adecuados para el cañón y la montaña.
La mejor temporada para visitar Matacanes es de marzo a principios de septiembre, después comienza la temporada de lluvia y el recorrido se vuelve peligroso. Si quieres evitar tumultos durante la ruta, lo mejor es comenzar muy temprano por la mañana.
Tomando esto en cuenta, lo único que queda por hacer es planear el viaje y disfrutar de la travesía.
