Ya hablamos hace algún tiempo de lo complejo de hacer un trayecto de viaje con un perro. Ahora, más allá del transporte, la elección de dónde hospedarse es crucial para que nuestros amigos de cuatro patas disfruten en de las vacaciones con nosotros.
Cuando son perros pequeños, un hotel pet-friendly es una buena opción. Pero cuando se trata de mascotas más grandes siempre es preferible elegir una casa donde puedan correr, tener su propio espacio y donde, además, no nos agobie la idea de que puedan molestar a otros huéspedes.
Afortunadamente, hoy en día es muy fácil conseguir casas que se ajusten a nuestras necesidades específicas en distintas plataformas. A continuación, enlistamos algunas opciones.
Para dos en Tepoztlán
Esta casa es perfecta para el solo travel, o los viajes en pareja. Tiene dos habitaciones y está a menos de dos horas de la CDMX. Además, con esta guía es imposible que te aburras en Tepoztlán.
Casa del sapo
En Playa Zapotengo, corazón de la costa oaxaqueña, esta casa es un paraíso rodeado de naturaleza para llevar a tu perro al mar por la mañana y disfrutar del atardecer desde la azotea.
Casa Aculco
Completa desconexión en un terreno donde tu perro se volverá loco de felicidad. Esta casa es para cuatro huéspedes.
Three Bedroom Waterside Casita
Una casa de lujo en San José del Cabo, dentro del complejo de Viceroy, donde tu perro también podrá descansar a sus anchas.
Casa Mague
Cada rincón de esta casa fue cuidadosamente diseñado. Disfruta de la paz que hay dentro, o sal a explorar los alrededores de Malinalco con tu perro.
Casa en Alto Lucero
Entre una playa y una laguna, esta casa es perfecta para los perros que aman el agua.
Casa Xochi
Para una escapada veloz desde CDMX y recargar pilas sin ir demasiado lejos.
Estudio Pargo
Parte de la gran casa La Extraviada, en Mazunte, este estudio tiene al mismo tiempo una ubicación privilegiada y toda la privacidad que buscas.
Un rancho en Valle de Bravo
Para ir con amigos, armar una carne asada maestra y dejar que los perros se agoten en el extenso jardín.
La casita de Chelem
Para la vida simple. Un perro, una hamaca, una pequeña alberca y vista al mar azul. No se necesita más.