Sin importar si eres un viajero ocasional o frecuente, seguro te has dado cuenta de que en los aviones, las temperaturas se mantienen frías. Lo anterior tiene una razón que poco tiene que ver con la altura y el clima al exterior.
En un estudio publicado por American Society for Testing and Materials se analizó el porqué de las bajas temperaturas características de la cabina aérea. Los resultados arrojaron que el motivo se relaciona con el síncope o desmayos repentinos.
A mayor temperatura (y altura), mayores son las probabilidades de desvanecerse, por lo que las aerolíneas mantienen los termostatos entre 18 y 20 grados, aunque se sienten mucho más fríos conforme avanza el recorrido. Aquí te dejamos unos consejos para evitar congelarte en tu siguiente vuelo.
1. Capas. Capas. Capas. El atuendo perfecto para viajar no existe, pero sin duda una de las recomendaciones más repetidas por los viajeros experimentados es llevar diferentes capas de ropa, sobre todo si vas a un clima distinto al de tu punto de partida. Apuesta por una capa ligera, una media, una gruesa y un par de comodines, es decir, una playera, un suéter ligero, una sudadera y una chaqueta de piel o una bufanda.
2. El equipaje de mano será tu mejor amigo. Si no te encanta la idea de llevar tanta ropa puesta, tu opción está en el equipaje de mano. Conserva a la mano un suéter fácil de doblar, pero que sea de un material grueso como la lana o el cashmere o bien, prendas térmicas.
3. Pide una botella de agua caliente. Es extraño, pero la próxima vez que subas a un avión y comiences a sentir frío, pide una botella con agua tibia o caliente. No la bebas, mejor sostenla entre las manos y los muslos, poco a poco sentirás que el calor vuelve a tus extremidades.
4. No sientas pena por pedir una manta. A bordo del avión siempre puedes pedir una manta y una almohada. Si sientes frío, sólo pide asistencia al personal a bordo. en cuestión de minutos tendrás una en tus manos y si no es suficiente, pide una extra sin pena.
5. ¿Parches o bolsas para lesiones? Parece extremo, pero son una gran opción para mantener la temperatura corporal. Los parches térmicos y las bolsas de gel usadas para lesiones que se calientan con un clic serán una forma de asegurarte que, sin importar nada, te mantendrás caliente. Sin embargo, usa sólo un parche por viaje y detén su uso media hora antes del aterrizaje. En el caso de las bolsas, hazlo por intervalos de no más de 15 minutos.