Aquí se filmó una de las comedias más icónicas de la historia del cine en los años 50 y se hospedaron presidentes y celebridades.
Aman lo hizo de nuevo y ahora ofrece una experiencia tranquila y acogedora en la ciudad que nunca duerme.
Desde los primeros sonidos del universo hasta el azul marino del Mar de Cortés, este recorrido revela que siempre habrá algo más para descubrir en este destino.
No hay mejor manera de conocer esta zona de playas paradisíacas que saliendo del hotel para dormir (casi) a la intemperie.
Desde hace 115 años, este hotel relata las historias del país desde otra perspectiva.
Desde noches estrelladas hasta desayuno con jirafas, estos resorts ofrecen un servicio exclusivo en medio de la jungla.
Estos tres paraísos están a un vuelo breve o unas cuantas horas de carretera desde la CDMX. Aquí el tiempo se detiene y puedes disfrutar de momentos de tranquilidad absoluta.
Ubicados en el poniente de la ciudad, estos hoteles llegan a cambiar nuestra idea de la hospitalidad.
Estas magníficas casonas antiguas, convertidas en hoteles, conservan su esencia tradicional.
También la lluvia es un pretexto para disfrutar de una aventura fuera de la ciudad.
Construido con motivo de los Juegos Olímpicos de México 1968, este hotel permanece como una obra maestra de la arquitectura moderna mexicana.
Prepara tus maletas y las de tu mascota, estos hoteles los reciben para brindarles un servicio exclusivo.
Producto de la inesperada alianza entre un político y un químico-geólogo, el Gran Hotel Garci-Crespo aprovechó la fama del agua mineral para establecer como un lujoso resort de descanso y, de paso, hacer de Tehuacán un famoso y cotizado destino turístico.
Con interiores cuidadosamente diseñados y ubicadas en destinos de descanso, son la opción para unos días fuera de la ciudad.
¿Cómo disfrutar de un merecido descanso durante la semana y sin salir de la ciudad? Esta puede ser la solución.