¡Qué sorpresa Melbourne! Una ciudad con más de cuatro millones de habitantes que no en vano es conocida como la capital de la cultura australiana. En la zona de Southbank se encuentra la National Gallery of Victoria, donde me tocaron dos exposiciones de artistas que admiro: Andy Warhol y Ai Weiwei.
No muy lejos se encuentra el Arts Centre of Melbourne, un complejo que comprende la Opera Australia, The Australian Ballet, Melbourne Theatre Company, The Production Company, Victorian Opera, Bell Shakespeare y Bangarra Dance Theatre. También ahí está el Hamer Hall, sede de la Melbourne Symphony Orchestra, y donde tuve la oportunidad de presentarme dirigiendo a la Queensland Symphony Orchestra en su primera gira internacional como parte de los BBC Proms. ¡Fue una experiencia muy grata!
Para conocer el lado ecléctico y bohemio de esta vibrante ciudad, recomiendo el barrio Fitzroy, donde se esconden, además, los mejores croissants del mundo, así que hay que llegar preparado para hacer fila por más de una hora. La Lune Croissanterie parece más un laboratorio que una panadería. Y aunque dudé varias veces durante la espera, cuando llegó mi turno y probé distintos sabores ¡todos estaban deliciosos! Pero los que más me gustaron fueron los rellenos de almendra y el reuben.
También en Rose Street, el Artists’ Market tiene a los mejores artistas y diseñadores independientes de la ciudad. Muy cerca, en Smith Street, se encuentra Saint Crispin, uno de los mejores restaurantes. Ofrecen un menú de tres a cinco tiempos acompañado de una gran selección de vinos. Preparan una excelente versión de coq au vin y un pork belly que se deshace en la boca, además de que los ostiones, que son mi debilidad, son una maravilla.
Para el café nos detuvimos en Alimentari, que tiene una gran variedad de ensaladas con aderezos exóticos, quesos finos, pastas caseras y otras delicias para llevar. Para acabar el recorrido, hay que caminar a Gertrude Street, que está llena de boutiques de diseñadores locales, de ropa y de muebles vintage, además de galerías de arte, tiendas de antigüedades y librerías especializadas.
Quiero regresar, me quedé con ganas de ver y sentir más el pulso de Melbourne, una ciudad llena de cultura, juventud y fácil de vivir.
Alondra de la Parra
Ha dirigido más de 70 orquestas en Francia, Alemania, Estados Unidos, Japón, Brasil, Suecia y Rusia (entre ellas la Orquesta de París, la Filarmónica de Londres, la Sinfónica del Radio de Berlín y la Cameristi della Scala de Milán). Actualmente es Embajadora Cultural Oficial de México. Sigue sus viajes en Twitter e Instagram en @alondradlp