Algunos son gigantescos centros comerciales flotantes, otros se parecen más a un pequeño hotel boutique. Unos recorren el Caribe y otros las caudalosas aguas del Amazonas (pero hay, desde luego, itinerarios por los grandes puertos europeos o las heladas costas de la Patagonia y Alaska).
Hay quienes se suben en familia, pero también los que van en pareja o con amigos. En fin, los cruceros son un enorme universo y una pieza importantísima de la industria turística mundial. Por eso decidimos que, para saber un poco más de ellos, lo ideal era platicar con los que mejor los conocen: los agentes de viajes.
El crucero más grande del mundo es el Allure of the Seas, de Royal Caribbean, un barco con 16 cubiertas de pasajeros y con capacidad para 5 400 huéspedes (para poner el número en perspectiva, en el hotel MGM Grand de Las Vegas caben 6 800).
El Aria, de Aqua Expeditions, tiene 16 camarotes, lo que significa que en su máxima capacidad lleva 32 viajeros a bordo. Todo lo que hay en el medio, entre los 5 400 y los 32 pasajeros, es ese gigantesco mundo de los cruceros.
Los hay de todos los tamaños, pero también de distintas temáticas, con rutas completamente distintas que cubren intereses que nada tienen que ver; desde ciudades coloniales hasta ríos remotos, desde plena naturaleza hasta pura historia.
Quizá por esto cuando le preguntamos a un agente de viajes cuál es el mayor mito alrededor de los cruceros nos responde sin dudarlo: “¡Que no son para todo el mundo!”, dice Lupita Álvarez de ITG. “Hoy en día, existe una gran cantidad de navieras muy diferentes entre sí, y siempre habrá alguna que se ajuste a los gustos, presupuesto y necesidades de los pasajeros”, añade.
Lo cierto es que para elegir un crucero hay que saber asesorarse para poder navegar el universo de opciones. Paula Gamas, socia fundadora de ITG comenta: “Un crucero es la mejor forma de viajar, hablando de la relación costo-beneficio; además, es divertido y hay para todas las edades.
Existen destinos que simplemente la mejor forma de conocerlos es en barco, y a diferencia de lo que muchos pensarían, 80 por ciento de los pasajeros que viajan en barco por primera vez a un destino, regresan. La clave es saber recomendar el barco perfecto en combinación con el recorrido perfecto para el cliente”.
Actualmente, hay cruceros en todo el mundo y, efectivamente, muchas veces son la mejor manera de acercarse a un lugar: algo que sucede en las islas griegas, donde moverse entre una y otra en ferry es un verdadero infierno, mientras que hacerlo a bordo de un crucero resulta mucho más sencillo, práctico e incluso económico (y además resuelve el problema de empacar y desempacar en cada puerto).
“Prefiero los cruceros que van a destinos que es difícil o complicado visitar por tierra, pienso en lugares como Galápagos, Alaska, Amazonas, Patagonia, etcétera. También prefiero barcos más pequeños, como Seabourn, Silversea y SeaDream”, dice Enrique Felgueres, presidente del Grupo Felgueres.
Muchos coinciden cuando se trata de viajar con niños. “Los más chiquitos se divierten con el simple hecho de estar en un barco, que además tiene alberca y actividades”, opina Lupita Álvarez, de ITG, al igual que Gloria Krahenbuhl, de Turismo Exmar, quien además recomienda “cruceros por el Caribe o los cruceros de Disney que salen de otros puertos, como Galveston o Cape Liberty”. Pero casi todos los agentes están de acuerdo en que los barcos de Royal Caribbean son ideales para cuando se viaja con menores.
Para Paty Carranza, de Turismo Exmar, no siempre se trata de las rutas, sino de las navieras. Cuando le preguntamos sobre qué rutas elegir cuando viajan adultos mayores o niños, nos responde: “Más que rutas, elijo navieras que ofrezcan un buen programa… En cuanto a rutas, depende de si son pasajeros que no tienen mucha movilidad, en este caso prefiero destinos en donde puedan caminar y ver cosas culturales de forma más cómoda”.
Desde luego, el tamaño también es clave, Paula Gamas dice: “Los barcos grandes ofrecen más shows, club de niños, casino, diferentes restaurantes, etcétera. Es más como estar en un resort. Los barcos son gigantescos y hay de todo, pero con la desventaja de tener mucha gente y colas para las actividades: cine, clases, spa, cuartos para todos gustos.
En cuanto a los barcos pequeños, éstos ofrecen un servicio más personalizado y especializado, de mejor calidad. Generalmente, hay conferencias a bordo, tienen excelente comida, cuentan con shows y casino, pero más pequeños. Muchas veces se trata de las mismas instalaciones y actividades, aunque todo es de calidad superior. Es como quedarse en un hotel boutique muy elegante”.
Para las familias queda claro por qué la opción de un crucero es buena. “Hay mucha diversión a bordo para todas las edades, cada quien puede hacer lo que más le guste durante el día y por la noche, las familias se juntan para cenar. Además, el costo todo incluido es muy atractivo y más cuando paga una sola persona (pregúntenle a los abuelos de familias numerosas)”, apunta Gloria Krahenbuhl.
En cuanto a los grandes mitos, la mayoría coincide en que el precio y la idea de que son aburridos son dos de los más extendidos. En realidad “un crucero es una gran opción para viajes multigeneracionales, familiares y con amigos que te permite conocer muchos destinos sin necesidad de estar empacando y desempacando cada día”, concluye Paty Carranza.
La clave está entonces en saber escoger una ruta y una naviera que cubra nuestras necesidades y gustos. “Se trata de una industria que ha crecido y se ha diversificado enormemente en los últimos años.
Hoy por hoy, contamos con una oferta muy variada de barcos: grandes, chicos, de lujo, para familias, cruceros oceánicos, de río, de aventura, etcétera”, dice Enrique Felgueres, y por eso es importante preguntarnos antes adónde queremos ir, con quién vamos y qué esperamos de la experiencia, ya que al tener claro esto es más fácil tomar una decisión. Aunque nadie como un agente experto para ayudarnos a elegir un crucero que esté hecho a nuestra medida. Tomen nota, y ¡anímese para la próxima!
- Cruceros con niños
Los expertos coinciden que, a la hora de viajar con niños, los mejores programas y los barcos con más espacios y mejores actividades para menores son:
Disney
Royal Caribbean
- Lo atípico
Navegar en velero
Ponant es el nombre de la compañía y de su velero. Sus rutas cubren todo el mundo, aunque esta primavera el barco se encuentra en el Mediterráneo.
- Por Myanmar
The Strand Cruise hace un recorrido por el río Ayeyarwadi de tres o cuatro noches, entre Bagan y Mandalay.
- Los expertos en lujo
Estas tres compañías ofrecen itinerarios por todo el mundo con un servicio de superlujo.
Silversea
Crystal Cruises
Regent
- En familia
Para viajar en familia (especialmente pensando en grupos numerosos y de múltiples edades) la combinación más exitosa es: tamaño, un barco grande o mediano (para que haya oferta de actividades para todos).
Ruta infalible: Caribe.
- Cruceros de aventura
National Geographic Expeditions
nationalgeographicexpeditions.com
Con expertos a bordo y rutas fuera de lo habitual, es una oportunidad única de acercarse a un destino de la mano de especialistas.
Poseidon Expeditions
Pocos pueden presumir de haber llegado al Polo Norte. Osos polares y una parada en Groenlandia en el camino garantizados.
- Los de tamaño mediano
Seabourn
Ofrece itinerarios por India, Australia, Nueva Zelanda y Asia, además de rutas más comunes.
SeaDream
Tiene una muy buena flota de barcos pequeños; su fuerte está en las rutas del Mediterráneo y el Caribe.
- Cruceros de río
AmaWaterways
Se especializan en rutas por Europa.
Hay que viajar con ellos por el Danubio.
Viking River Cruises
Tienen una gran oferta en Europa, pero especialmente en la ruta por el Rin.
Aqua Expeditions
Su ruta original recorre el Amazonas peruano saliendo de Iquitos. Su nueva ruta en el sudeste asiático recorre el río Mekong desde Ho Chi Minh, en Vietnam, hasta Siem Reap, en Camboya.