Hoy, para hablar de Ferdinand Berthoud, hay que remontarnos al siglo XVIII, cuando la navegación era crucial para las grandes potencias del mundo. Entonces, los reyes de Inglaterra, Francia y España promovían una solución a la cuestión de la longitud geográfica, uno de los problemas más graves que enfrentaban los navíos al perder el rumbo en alta mar. Berthoud, que había nacido en Suiza pero había estudiado relojería en Francia, dedicó gran parte de su vida justamente a crear piezas de relojería de alta precisión que permitieran a los navegantes saber la hora exacta en el punto de partida para utilizarla como referencia y poder determinar la longitud.
Berthoud, quien además fue muy generoso con sus conocimientos al publicar gran cantidad de libros y tratados sobre relojería y navegación, consiguió crear cronómetros marinos precisos y confiables, gracias a lo cual fue nombrado Horloger Mécanicien du Roi et de la Marine. Aunque su trabajo siempre fue reconocido, con su muerte, su tradición relojera parecía haber desaparecido también. Unos 200 años más tarde, Karl-Friedrich Scheufele, copresidente de Chopard y artífice del L.U.C.eum –un museo dedicado a la relojería en Fleurier, Suiza–, descubrió a Berthoud gracias a una de las piezas de colección adquiridas para el museo y quedó fascinado por su trabajo.
Berthoud consiguió crear cronómetros marinos precisos y confiables, gracias a lo cual fue nombrado Horloger Mécanicien du Roi et de la Marine.
Scheufele consiguió reactivar la marca y traer la herencia de Ferdinand Berthoud al siglo XXI, un esfuerzo que tomó casi 10 años y que culminó con el FB 1, presentado en 2015, una pieza que no tardó en convertirse en uno de los grandes favoritos de los coleccionistas. Con esta nueva generación de relojes Berthoud, logró combinar el savoir faire con la más alta tecnología: el delicado trabajo artístico que se lleva a cabo en su totalidad por manos artesanas con los más ambiciosos avances tecnológicos (tan sólo con su primer modelo se registraron cuatro patentes).
Ocho años más tarde, en Watches and Wonders 2023, se presentaron 38 ejemplos de este calibre, por primera vez en una caja redonda, lo que dio vida a FB 2T – Final Edition, una colección cuyo diseño habla de toda una experiencia relojera. Las innovaciones técnicas, además de la arquitectura y el diseño, explican por qué éstas serán algunas de las piezas más codiciadas por los grandes apasionados de la relojería.
