En el eterno dilema de qué hay que meter en la maleta, el destino marca la pauta. En esta ocasión, el Rosewood de Mayakoba: un destino de playa con clima cálido y noches lluviosas en algunas épocas del año, en el que no hay que sufrir mucho por caminar trayectos largos porque siempre habrá una bici en la puerta de tu villa o un carrito de golf para evitar la fatiga.
El plan es tirarse al sol por horas y únicamente dejar el camastro para visitar alguno de sus restaurantes, como Aquí Me Quedo, donde sirven ceviches frescos, cocos y bebidas a la orilla del mar. Entonces…, ¿qué hay que empacar?
Alpargatas de colores neutros
Cuando hablamos de zapatos para llevar a la playa, las alpargatas encabezan la lista de los más adaptables. Igual funcionan para una mañana en la playa que para una cena informal por la noche. Y, si son en tonos neutros, como el beige, ¡mejor! Éstas son
Una colaboración entre el Rosewood y la marca de zapatos neoyorquina Soludos.
Traje de baño negro de Dulce Armenta
Según la premisa de que menos es más, en Dulce Armenta han creado una línea de trajes de baño con diseños simples, pero de calidad impecable.
La inspiración viene de las artes visuales, los movimientos y la fortaleza del cuerpo femenino. El resultado, en este caso, es un traje de baño de una pieza, hecho en México con materiales colombianos y un diseño que favorece a prácticamente todo tipo de cuerpo, sin importar la talla.
Exfoliating Enzyme Mask de Sisley
Para los viajeros que quieren llevar su rutina de skincare en la maleta, este producto es perfecto. La nueva mascarilla de Sisley realiza un peeling muy suave.
Basta con dejarla actuar durante un minuto para sentir la piel suave y uniforme. Lo mejor: ocupará un lugar ínfimo en tu equipaje.
Rolex Oyster Perpetual Deepsea Challenge
Para los amantes de aguas profundas. Este reloj experimental, presentado de la mano del cineasta y explorador James Cameron, es capaz de resistir cualquier inmersión. Cuenta con garantía de hermeticidad hasta una profundidad de 11,000 metros.
