Playa, agave y ciudad: tres hoteles en Oaxaca
Para conocer las distintas caras de Oaxaca: hoteles en montañas, en la playa, entre campos de agave y a unos minutos del barullo de la ciudad.
Para conocer las distintas caras de Oaxaca: hoteles en montañas, en la playa, entre campos de agave y a unos minutos del barullo de la ciudad.
Esta controvertida categoría culinaria normalmente no merecería un análisis muy profundo, pero, debajo de todas las capas de queso amarillo y guacamole, se esconde una tradición profunda y las historias de los mexicanos que la cimentaron.
Oaxaca goza de una diversidad de hongos tan amplia como abrumadora, que se ha integrado a su patrimonio cultural como parte indispensable de su gastronomía e incluso de su misticismo
El arte contemporáneo en Oaxaca se imprime. Los artistas de la ciudad han escogido las técnicas gráficas como la forma ideal para expresarse, una tradición que se ve por sus calles y se remonta a Toledo y Tamayo.
El búnker de St. Pauli, en la ciudad de Hamburgo, ha transformado su pasado para convertirse en un hotel y espacio cultural.
En el taller Kiae Dayn, en Teotitlán del Valle, los textiles oaxaqueños cobran vida, uniendo la tradición y el futuro de una de las artesanías más icónicas del estado.
Esta estructura tiene más de dos mil años y, aunque fue construida en el antiguo Egipto, ahora descansa en el centro de Madrid.
El Pompidou atravesará una amplia remodelación que llevará más de cinco años en completarse.
El discurso oficial dice que en Oaxaca se pueden encontrar hasta siete diferentes tipos de mole, sin embargo, la realidad es mucho más grande.
De Oaxaca se ha hablado hasta el cansancio, también se ha llenado de lugares invadidos por el turismo. Esta es una guía alternativa a todo eso.
Esta comunidad de buzos ha encontrado en Nueva York un destino inesperado para practicar buceo, en medio de tesoros hundidos.
El museo Thyssen es una parada imperdible para los amantes del arte en Madrid y estas son sus obras imperdibles.
La fotógrafa Paola Vivas nos muestra registros fotográficos de sus recorridos por la costa oaxaqueña.
Algunas de estas islas son paraísos biodiversos y otras fueron antiguos reinos codiciados por potencias
Esta serie de caminos subterráneos pasaron desapercibidos por más de 500 años.