No por sonar a cliché es menos cierto: este es un destino como ningún otro para aquellos viajeros que buscan entretenimiento.
Su oferta de shows, casinos y lujosos hoteles la han consagrado como una ciudad inigualable para fiestas y vida nocturna, a lo que le debe el apodo de “la ciudad del pecado”.
Sin embargo, desde hace algunos años Las Vegas ha buscado expandirse más allá del siempre vivo Strip, apostando, entre otras cosas, por ser anfitriona de los mejores eventos del deporte.
A diferencia de otras grandes ciudades en Estados Unidos, nunca había tenido estadios o equipos deportivos.
Entre las luces y el espectáculo, en realidad no era ninguna prioridad y, con todo lo que tenía para ofrecer, había pocos visitantes que se daban cuenta que algo hacía falta.
Pero, Las Vegas es un destino que constantemente busca reinventarse para permanecer en el mapa. Nunca deja de sorprender con residencias de los mejores artistas del mundo o el portento arquitectónico de algún hotel, y su más reciente transformación es en una ciudad deportiva.
A pesar de tener que empezar de cero, Las Vegas ha logrado sumar espectáculos deportivos de talla internacional entre su amplia variedad de entretenimiento y prácticamente lo hizo de la noche a la mañana.
Hasta hace cinco años, la ciudad no era hogar de ningún equipo profesional y ahora tiene cuatro en algunas de las mejores ligas deportivas de Estados Unidos.
En ese poco tiempo incluso han cultivado importantes éxitos con su equipo de basquetbol femenil, Las Vegas Aces, que se convirtieron en una sensación de la ciudad después de coronarse campeonas este año.
Otras franquicias como los Golden Knights de la NHL y los Raiders de la NFL han aterrizado en la ciudad atraídos por la oportunidad de invertir en un negocio redondo que junta a la afición con el mejor entretenimiento del mundo.
La apuesta además tiene pretensiones globales e incluso se ha sumado al mundo de la Fórmula 1.
A partir de la próxima temporada, Las Vegas será una de las tres paradas que el máximo circuito del automovilismo hará en Estados Unidos, junto con Austin y Miami, llevando a la ciudad todo el glamour, la emoción y, lo más importante, miles de aficionados que el próximo noviembre viajarán desde diferentes partes del mundo para el Gran Premio.
La prueba más grande de que Las Vegas se ha convertido en una capital del deporte es su selección como anfitriona del que quizá sea el evento más importantes del país: el Super Bowl.
Dentro de dos años, su espectacular Allegiant Stadium, uno de los estadios más modernos del mundo, con un costo de construcción de cerca de 2 mil millones de dólares, recibirá el prestigioso partido.
Y no es que Las Vegas no esté preparada para acoger eventos de esa talla. Por el contrario, históricamente ha sido el destino predilecto para las más importantes peleas de box.
La atmósfera de la ciudad aporta una energía especial en todos sus eventos, hace que cada momento se sienta como una fiesta y le da comodidades extraordinarias a los aficionados.
Con su nueva y más grande inmersión en el deporte, Las Vegas quiere replicar ese ambiente todos los fines de semana, en cada uno de los partidos de sus equipos locales.
Si de por sí ya era uno de los destinos más visitados en todo Estados Unidos, sus nuevas franquicias deportivas se han convertido en otra razón para una escapada a Las Vegas.
Ahora, además de poder disfrutar de sus famosos espectáculos o de su creciente oferta gastronómica, también podrás aprovechar el viaje para ver algún partido.
