Pensarán que es un viaje sólo para fanáticos, pero lo cierto es que hasta el más escéptico termina por convertirse en admirador cuando llega a la famosa base espacial: el Centro Espacial Kennedy.
Tal vez suena a plan chino (sin ninguna ironía). Tal vez suena a la versión espacial de Disney, y algo hay de ello. No por nada dicen que fue la nasa la que en su momento asesoró a Walt Disney en su empresa de crear un parque de diversiones como de otro mundo (¿o la historia era al revés?). Lo cierto es que es un paseo ideal para hacer en familia porque, sí, efectivamente, el Kennedy Space Center Visitor Complex recuerda más a un parque temático que a una base aeronáutica, o lo que es lo mismo, a un sitio amigable. Y como no hay muchas otras posibilidades para acercarse al mundo de los astronautas —pues China y Kazajistán están ligeramente fuera del alcance de la mayoría—, Florida resulta el paseo más factible.
Ahora bien, la novedad es que el recorrido se ha vuelto más auténtico, los visitantes pueden entrar a una de las plataformas de lanzamiento, la misma desde la cual han despegado el Apolo y el transbordador espacial. Para ser más específicos, se trata de la 39A, en la zona de alta seguridad. La idea de estos tours es extender la visita a los 570 kilómetros cuadrados que ocupa todo el centro. Claro, el acceso es limitado, pero la perspectiva del complejo es espectacular. Aunque para que el paseo merezca del todo la pena habría que ir a ver un despegue.
*Hay que revisar calendario y apuntarse con tiempo a los recorridos.
