Costa Rica se caracteriza por sus playas paradisiacas y bosques tropicales. Y si bien es cierto que el turismo es una de sus principales actividades económicas, este país sí que ha sabido aprovechar el flujo de viajeros y la derrama económica de dicha industria para proteger sus áreas naturales, esos escenarios siempre verdes que son los favoritos de los visitantes.

Un ejemplo de ello es que, en los últimos 30 años, esta región de Centroamérica logró duplicar el número de bosques que crecen en su territorio; de hecho, el 52% de la superficie nacional está cubierta por árboles, plantas tropicales y follaje de todo tipo, según la Universidad de las Naciones Unidas.

Foto: Travelling tall girl.

Los bosques de Costa Rica

Por allá de 1940, Costa Rica era 75% bosque tropical; sin embargo, la deforestación sin control provocó que para 1983, sólo el 26% del territorio contara con algún tipo de vegetación forestal. Por suerte, esta situación prendió la alarma ecológica y cobró un carácter nacional: autoridades, comunidades indígenas y la población en general unieron fuerzas para iniciar con las labores de reforestación. Hoy en día, abundantes arbolados crecen en tierras que solían usarse para cultivos y pastizales.

Una de las medidas que se tomaron fue la creación de incentivos para quienes protegieran las zonas naturales. Por ejemplo, en 1996 nació el Fondo Nacional de Financiamiento Forestal y su programa de recompensa que otorga hasta 120 dólares por área de bosque conservada. Dicha iniciativa logró hacer del cuidado ambiental una actividad rentable que, hasta a la fecha, suma alrededor de 18 mil empleos directos y unos 30 mil de forma indirecta. Una cantidad significativa para una nación con apenas 4.5 millones de habitantes.

Costa Rica duplicó su número de bosques.

Foto: Cosmic timetraveler.

Políticas verdes

En 1969, Costa Rica aprobó su primera ley forestal, la cual regula los permisos de tala, y creó el Departamento Forestal de Costa Rica. Poco a poco, esta actividad disminuyó hasta alcanzar el antes utópico número de la tala cero en 1998. Todas estas iniciativas, junto con muchas otras que han ayudado al desarrollo de Costa Rica, son posibles gracias a que este pequeño país, en un acto pacifista, disolvió su ejército en 1948, lo cual hizo posible que se canalizara gran parte de sus inversiones en programas sociales y ambientales.

Costa Rica duplicó su número de bosques.

Foto: Ruben Ramírez.

Turismo sustentable en Costa Rica

Como está ocurriendo en aquellos países preocupados por su recursos naturales, en Costa Rica es más común el turismo rural, promovido por guías locales, quienes ademas de brindar el servicio a los viajeros, se encargar de la preservación de los entornos. Una opción es Pacific Journeys, una compañía familiar que ofrece experiencias de aventura en las Reservas, pruebas gastronómicas en los jardines de los lugareños o caminatas a través de frescos senderos. Para algo más espiritual e íntimo, cuentan con retiros para grupos pequeños. Puedes encontrar más información aquí.

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